El dólar está rebelde. Eso, por lo menos, se escucha en el mercado. Desde inicios de febrero la divisa norteamericana empezó a experimentar un aumento importante en su precio. Si a principios de 2024 la moneda estadounidense rondaba los $ 877, casi 60 días más tarde trepó hasta los $ 989. Actualmente, el valor del billete verde sigue siendo alto: el martes quedó en los $ 961.
Rafael Weber, analista de estudios de Capitaria, entrega dos razones para explicar este fenómeno: “La primera es que el mercado sigue esperando que el diferencial de tasas que existe entre Chile y Estados Unidos siga acostándose, situación que ha generado salida de divisas de nuestro país por efecto de carry trade, considerando que van a buscar rendimientos más atractivos en otras economías. Y segundo, la menor producción de cobre en Chile ha disminuido el ingreso de la divisa norteamericana al país dando un apoyo alcista adicional a la cotización del billete verde”.
También afectan, comenta Ricardo Durán, economista y académico UDLA, “la ventas de dólares llevadas a cabo por el ministerio de Hacienda desde enero de este año, lo que explica el interés de inversionistas por demandar y con ello presionar al alza el valor de la divisa”.
El consenso entre los expertos es que el precio de la divisa estadounidense es alto. Claudia Barrera, economista y gerente de finanzas corporativas en PKF Chile, dice que no ve “fundamentos para que el precio del dólar se mantenga en los niveles que hoy día presenta. Sin embargo, la inexistencia de consenso a nivel político sigue presionando al dólar, sacándolo de la trayectoria que presenta a nivel global. Se me ocurre que una vez que se produzcan acuerdos en los ámbitos tributarios y previsionales, el dólar va a tomar un equilibrio que refleje más bien su verdadero valor”.
Proyecciones
Las proyecciones respecto al mercado de divisas siempre es un tema complejo, ya que es un rubro muy volátil cuyos resultados se ven afectados por una multiplicidad de factores. A pesar de eso, los expertos ya están delineando una serie de escenarios para 2024.
“Para este año, se espera que el dólar muestre una tendencia lateral o moderadamente depreciatoria frente al euro, influenciada por la posibilidad de recortes de tasas de interés en EE.UU. y un posible aumento del gasto público asociado a las elecciones presidenciales en 2024 en dicho país”, indica Manuel Astaburuaga, CEO de Levannta.
Por su parte, Rafael Weber señala que en el corto plazo “la dinámica del diferencial de tasas entre Chile y Estados Unidos impulsa un fortalecimiento del dólar frente al peso chileno. En este contexto, se anticipa que la cotización del dólar podría experimentar incrementos”.
Y agrega: “A medida que avancemos hacia el mediano plazo, la situación podría tomar un giro distinto. La expectativa de que la Reserva Federal de los Estados Unidos inicie un ciclo de reducción de tasas en sus próximas reuniones, proyectadas para mediados de este año, sugiere un debilitamiento potencial en el tipo de cambio. Esta anticipación de un cambio en la política monetaria estadounidense podría aliviar el valor del dólar frente al peso, favoreciendo una tendencia de debilitamiento de la divisa norteamericana. Las proyecciones indican que, hacia fines de 2024, el escenario podría ser más favorable para el peso chileno, con estimaciones que sugieren una apreciación de esta moneda con relación al dólar, fluctuando entre rangos más bajos que los actuales”.
Ricardo Durán tiene otra lectura. Dice que “no hay consenso acerca de cuál será la situación del dólar en el año” y que “los datos de inflación y actividad en Estados Unidos junto con la actividad económica en China serán los elementos para considerar”. Y complementa: “De no mediar algo inesperado, la FED debería bajar la tasa de interés durante el año, lo que de seguro apreciará la divisa a nivel mundial”.
Cuentas corrientes dólares
Según cifras de la Comisión para el Mercado Financiero (CMF) a diciembre de 2023, en total existen 892.082 cuentas corrientes con moneda extranjera.
Si bien el número ha crecido sostenidamente desde 2011, los montos han caído de forma importante: si en diciembre de 2022 el saldo total en cuentas corrientes en dólares para personas naturales era de $ 1.415.601 millones, 12 meses después esa cifra bajó a $ 1.081.407 millones. “La opción de abrir una cuenta en dólares puede servir para diversificar riesgo cambiario, lo que amortigua en alguna medida las fluctuaciones de tipo de cambio, pero de ninguna manera asegura no verse afectado”, apunta Diego Soffia, director ejecutivo de Efectivo.
“Si yo soy una persona que viaja mucho, quizás tener una cuenta en dólares sea una buena alternativa. Si por otro lado facturo en dólares o tengo la posibilidad de recibir constantemente dólares, podría ser una buena alternativa”, explica Claudia Barrera.
Pero matiza: “No veo el ahorro en dólares o la retención de dólares como un negocio en sí mismo. Sigo creyendo que la economía chilena es una economía donde existen oportunidades de inversión las que se van a notar con mayor claridad una vez que se estabilicen las situaciones de desequilibrio que hoy día estamos observando y a las que ya me he referido”.
Y añade: “Mi expectativa es que el dólar va a tener una baja, por lo tanto, no es necesario apresurarnos en prepagar aquellas cosas que estén hoy nominadas en dólares. Por el contrario: si tenemos cobranza en dólar, tratar de acelerar esa cobranza y liquidar para aprovechar este precio que pareciera alto”.
¿Se puede aprovechar el alza?
Se trata de una pregunta que divide a los expertos. Muchos dicen que, si bien algunas personas logran tener inversiones exitosas en la industria de las divisas, lo recomendable es no acercarse a este mercado buscando generar ganancias. Otros, en cambio, comentan que sí hay espacio para lograr rentabilidades.
“Una manera de aprovechar el alza del dólar es adquirir físicamente la divisa norteamericana, pudiendo venderlo en el futuro y obtener beneficios por la diferencia de precio. Otra forma es mediante los Contratos por Diferencia (CFD), que son instrumentos financieros derivados que permiten a los inversores especular sobre los movimientos de precios de diversos activos, incluidas las divisas, sin la necesidad de poseer el activo subyacente. Esto significa que puedes beneficiarte de las fluctuaciones en el valor del dólar, ya sea que su precio aumente o disminuya, dependiendo de tu posición (compra o venta)”, asevera Weber.
Diego Soffia, gerente de finanzas de Efectivo por su parte, analiza: “Dependerá de las expectativas de cada uno respecto a los valores futuros. Si soy importador, trataría de ‘asegurar’ el valor de tipo de cambio cercano a los $ 900, pero si soy exportador, puede convenir ‘fijar’ el valor en las cifras en que se cotiza actualmente. Para esto existen herramientas como forward, swaps y opciones de divisas. Pero para el consumidor final lamentablemente, como se ha visto en las cifras del IPC, el mayor valor del dólar ya se ha traspasado a precios”.
Y Juan Nagel, académico de la Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales de la Universidad de los Andes, ve con lejanía la idea de invertir para “aprovechar” el alza del dólar: “Es poco recomendable, dado el alto nivel de riesgo que existe con la divisa. En general, yo recomiendo que las empresas que tengan deudas significativas en dólares, se cubran con los instrumentos que le permitan aislarse de los vaivenes del precio de la divisa”.
Otras monedas
No todo es dólar. Existen una serie de monedas que tienen un buen rendimiento. Spoiler: no es el peso chileno, que ha sido la divisa con peor desempeño en el mundo en lo que va del año, según Bloomberg.
El economista Ricardo Durán señala que “el euro se debilitó con respecto al dólar en el primer mes del año y se ha fortalecido desde febrero gracias a la caída de la moneda norteamericana”.
Claudia Barrera, por su parte, analiza: “Las divisas que para nosotros son importantes corresponden al dólar, el euro y la libra británica. Creo que en el largo plazo, esas monedas se mueven en una trayectoria altamente correlacionada. Por lo tanto, en la medida en que estemos apostando a largo plazo, el gran público no va a tener espacio para ganancias materiales a partir de los diferenciales en esas divisas”.
Otra visión tiene Gonzalo Muñoz, analista de mercados XTB Latam: “Una divisa que se está fortaleciendo mucho frente al dólar es el yen japonés, en donde vemos que en medio de una economía que posee tasas de interés negativas y medidas para estimular el consumo, tanto la bolsa japonesa como la divisa muestran resultados que podrían significar ajustes y cambios en la estrategia del Banco Central de Japón, de salir de las tasas de interés negativas”.
Y Nagel de la Universidad de los Andes menciona el peso mexicano: “Esto, producto de la tendencia al ‘nearshoring’, que está impulsando la inversión en ese país. La cotización ha bajado desde unos 18 pesos por dólar en octubre a 16,8 en los últimos días. Si, a su vez, consideramos que el dólar mismo se está fortaleciendo, la revalorización del peso mexicano se hace aún más pronunciada”.