“Fue un esfuerzo realmente muy importante de todos los actores -Hacienda, la Dipres, La Moneda, la Superintendencia y nosotros- para lograr algo que parecía muy difícil, que es cumplir el compromiso de llegar con la indicación del Presidente de la República para mejorar el proyecto”, señaló el ministro Jaime Mañalich al presentar ayer a la Comisión de Salud del Senado la nueva versión del proyecto de reforma a las isapres que sustituye a la iniciativa original enviada por el actual gobierno en abril pasado.
En la exposición del secretario de Estado y del Superintendente (S) del sector, Patricio Fernández, se confirmó que este diseño establece un futuro Plan de Salud Universal (PSU) para el sistema asegurador privado que opera sobre una tarifa única.
A partir de esta base, se aplicará un descuento de 50% en el precio del plan de salud para las personas menores de 24 años, rebaja que se ajusta a 25% en el caso de los beneficiarios mayores de esa edad y menores de 50 años.
Asimismo, confirma la eliminación de las preexistencias como una alternativa de exclusión de la contratación PSU y el establecimiento de periodos de carencia que impliquen diferencias entre afiliados –manteniendo en esto las bases del proyecto de reforma anterior-, por lo cual “no existirán afiliados cautivos y quienes estén adscritos a un isapre y deseen cambiarse a otra no tendrán limitaciones de acceso”, se detalló en la presentación.
Al mismo tiempo, y tal como en la versión precedente, la propuesta fija medidas de resguardo para contener a quienes busquen incorporarse al futuro sistema, con un periodo de transición de 18 meses. Pero a diferencia del diseño anterior, que fijaba un tope de cobertura de 25% a nivel general, ahora ese máximo se aplica sólo a las enfermedades preexistentes y no para las nuevas patologías.
“Este es un mecanismo más amplio que el que había en el proyecto anterior”, indicó Mañalich.
En relación al desarrollo de la tramitación en el Senado, el titular del Minsal indicó que “estamos muy tranquilos y si aparecen dificultades o controversias vemos con mucho optimismo que vamos a poder superarlas”, confirmando sus expectativas de iniciar la votación del proyecto a mediados de agosto. “Sería extraordinario terminar el segundo trámite constitucional de este proyecto para Fiestas Patrias”, agregó.
IPC de la salud
Las indicaciones incorporaron un IPC de la Salud referencial cuyo objetivo es mostrar la variación de los costos entre un año y el anterior para el ajuste de los precios del PSU. “Anualmente el INE deberá calcular respecto de las isapres indicadores de las variaciones de los precios de las prestaciones de salud, en el uso de las mismas y del gasto en Subsidio de Incapacidad Laboral (SIL)”, explicó Fernández, quien manifestó su expectativa de que “esto sirva de base para disminuir la judicialización por concepto de adecuación de planes de la salud”.
Las indicaciones del INE serán la base del cálculo de los índices de variación del precio del PSU que deberá calcular anualmente el panel de expertos, órgano asesor del Ministerio de Salud, respeto del cual se informó una variación en su composición, ya que ahora se propone que sus integrantes técnicos correspondan a dos académicos del área de la ingeniería, economía o finanzas, y un experto en el área de salud pública nombrados por concurso público. Estos ejercerán por cuatro años renovables por un período.
Mayor fiscalización
Las indicaciones incrementan las facultades fiscalizadoras hacia las isapres por parte de la Superintendencia de Salud, obligando a las aseguradoras a proporcionar toda la información establecida en el artículo 10 de la Ley 18.045 de Mercado de Valores.
“En términos prácticos, esto nos permite tener acceso a mucha información que actualmente no tenemos y la ley de mercado de valores amplia eso en beneficio de una mayor transparencia en aspectos como la información relacionada a los controladores o la integración vertical”, sostuvo Fernández, quien proyectó que los reclamos presentados contra las isapres sumará 40 mil a fines de este año, contra los 26 mil de 2018.
Asimismo, ese organismo fijará los requisitos de idoneidad que deben reunir las empresas de auditoría externa que revisarán a las isapres.
Otras claves
Junto con destacar que uno de los sellos es potenciar la implementación de las coberturas de las patologías GES, el nuevo diseño estableció que las isapres podrán contar con hasta tres redes de prestadores para entregar las atenciones contempladas en los planes.
Entre los detalles de la propuesta destacan también:
-No se podrá establecer copagos para prestaciones hospitalarias superiores al 20% ni para prestaciones ambulatorias superiores al 50% del arancel de referencia del PSU.
-En las atenciones otorgadas fuera de la red contratada, la bonificación a cargo de la isapre será equivalente al 80% de la que correspondería para la misma prestación dentro de la red contratada, lo cual busca incentivar la resolución dentro de los convenios establecidos por la aseguradora.