En medio de un escenario complejo para la economía Argentina y que ha repercutido a las empresas nacionales que tienen negocios allá, la aerolínea Latam Airlines repatriará parte de las operaciones que tiene al otro lado de la cordillera.

De acuerdo a lo informado por el periódico Cronista, la empresa ofreció a 26 trabajadores del área comercial en Argentina, especialmente a los que cumplían tareas en marketing, su traslado a Santiago o, en caso de no aceptar esa opción, el retiro voluntario.

Consultada la aerolínea por el diario, la reestructuración no responde al complicado momento que vive el negocio aéreo trasandino con la depreciación del peso argentino y llegada de nuevas aerolíneas low cost, sino que  se trata de una decisión que viene como consecuencia de la fusión de LAN y TAM.

"Latam Airlines informa que, como parte del proceso de reordenamiento de su área de gestión comercial, algunas tareas que hasta el momento eran desarrolladas de manera local serán centralizadas por casa matriz a partir del 30 de junio próximo, con el objetivo de unificar la forma de gestionar los puntos de venta en el grupo y buscando una mirada transversal, alineada a la estrategia global de la compañía", explicaron desde la empresa, que cuenta con 2.400 empleados en el país trasandino.

"En la Argentina, todas las personas alcanzadas por esta reestructuración han recibido propuestas de continuidad laboral por parte de la compañía en Santiago de Chile", agregaron.

Desde la empresa informaron además que algunos empleados aceptaron el traslado y otros lo analizan. En caso de no querer instalarse en el país vecino, la empresa les ofrece un retiro voluntario.

En la publicación indican que la decisión de Latam -según fuentes del sector- es reducir costos ante la fuerte presión al negocio que le significa el fuerte salto del dólar en el mercado argentino. De hecho, agregan que para ganar eficiencia, la chilena cerró en los últimos meses algunas rutas de menor rentabilidad.

Entre las internacionales, ante la caída de la demanda de argentinos, dejó de volar en marzo de Tucumán a Santiago de Chile y San Pablo; desde julio no operará entre Rosario y San Pablo.

En cabotaje, ya no vuela de Aeroparque a Bahía Blanca ni a San Juan para "garantizar la sustentabilidad de Latam en el mercado doméstico local"; "obedeció estrictamente al desbalance entre costos operativos e ingresos generados", explicaron días atrás, ante una consulta del periódico.

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