Esta pasada semana la empresa Colbún decidió dar marcha atrás en su proyecto de almacenamiento de energía renovable "Central de Bombeo Paposo" en Taltal, región de Antofagasta, y que tenía un costo US$1.400 millones.
La decisión se dio una semanas después que el Servicio de Evaluación Ambiental (SEA) de Antofagasta determinara mantener el término anticipado del procedimiento de evaluación de la iniciativa y, además, rechazara un recurso de reposición que presentó la empresa en esta materia.
Al respecto, el CEO de Colbún, José Ignacio Escobar, conversó con Mesa Central de Canal 13, donde precisó que fue que la autoridad ambiental quien terminó anticipadamente el proyecto: "El proyecto lo saca el Servicio de Evaluación (Ambiental). Ellos dan un término anticipado aludiendo a que faltaba información necesaria de caracterización de algunas comunidades y que falta una caracterización de un farellón costero. Nosotros recursamos este término anticipado, aludiendo a que la parte la comunitaria y la de flora y fauna había información necesaria y suficiente para poder hacer el proceso", sostuvo.
Escobar también reconoció que exista una afectación en las comunidades, en particular a dos de estas: "Una se conformó durante el proceso, por lo tanto no podíamos evaluarla básicamente porque no existía pero cuyos individuos si estaban caracterizados en otra comunidad, pero nosotros al reconocer afectación en comunidad y población indígena, como si lo hicimos, eso gatilla una consulta indígena, y es en el marco de la consulta indígena, donde no llegamos porque nos terminaron el proyecto, donde el Estado que determina el impacto y alcance de las comunidades que hay que evaluar y caracterizar, y las medidas de mitigación y compensación en caso de ser necesario. Por lo tanto, el proceso quedaría cubierto por la consulta indígena", precisó.
De momento, el CEO de Colbún aseguró que están evaluando qué acción tomar y acusó "un cuello de botella" en los permisos que requiere el Estado para este tipo de proyectos: "El problema de la permisología está identificado hace tiempo, es un círculo vicioso que lleva muchos años", dijo.
En ese sentido, dijo no creer que haya sesgo con el proyecto: "Creemos que es parte de una institucionalidad que no está funcionando con la velocidad, certeza y claridad que esperaríamos que funciona para este tipo de proyectos", añadió.
Sobre el mismo tema, aseveró: "Más que un tema político o ideológico respecto al desarrollo de las energías renovables, vemos una tremenda disparidad en criterios de evaluación".