La empresa número uno del mundo en streaming musical, Spotify, salió a Bolsa con buen pie y sus acciones lograron venderse a 165,90 dólares.

Si bien el primer valor oficial de la acción de la empresa sueca se dio a conocer hoy más de tres horas después del inicio de las operaciones de la Bolsa de Nueva York (NYSE, por sus siglas en inglés), la demanda de los inversores fue grande: los títulos abrieron con un valor un 26 por ciento superior al de referencia establecido por la NYSE, de 132 dólares.

De esta forma, la empresa adquirió al inicio de las operaciones de la Bolsa unos 29.600 millones de dólares. Los expertos habían concedido a Spotify un valor de alrededor de 20.000 millones de dólares a pesar de sus pérdidas crónicas.

Spotify no buscaba recaudar dinero

A diferencia de otras ofertas iniciales públicas (IPO, en inglés), Spotify no buscaba recaudar dinero en el mercado con una emisión adicional de títulos, el principal objetivo de lanzamientos bursátiles de este tipo.

Se trató de una cotización directa en el mercado, sin que ningún grupo bancario suscribiera la oferta. La compañía había anticipado que el precio de salida estaría determinado por la demanda del mercado.

Tampoco hizo el típico "roadshow" o ronda de promoción entre grupos de inversores, y ninguno de sus directivos asistió a la Bolsa de Nueva York (NYSE) para el tradicional martillazo inicial de las operaciones cuando hay un debut.

"No cambia quiénes somos"

En palabras de la empresa, Spotify ha querido evitar la "pompa y circunstancia" que atrae este tipo de operaciones, y sencillamente optó por acudir al mercado bursátil para que los actuales accionistas puedan negociar públicamente sus títulos.

Según el máximo directivo de la compañía, Daniel Ek, los empleados y accionistas de Spotify llevan años vendiendo y comprando los títulos. El lanzamiento de hoy, agregó en su blog, "no cambia quiénes somos, lo que hacemos y cómo operamos".

El CEO de Spotify, Daniel Ek, de 35 años, define su misión como la oportunidad de dar a millones de artistas la posibilidad de vivir de su arte y a los fans de disfrutar de él, pero su principal problema es que hasta el momento no ha hecho dinero con ello.

Constantes pérdidas operativas

Spotify es el líder claro en el streaming musical pero está muy lejos de constituir un negocio rentable. A finales de 2017 la empresa sueca contaba con 71 millones de abonados y 159 millones de usuarios en total. Pero pese a su enorme crecimiento -la facturación aumentó el año pasado casi un 39 por ciento-, las pérdidas operativas se incrementaron de 349 millones a 378 millones de dólares.

En 2018 la compañía quiere superar la marca de los 200 millones de usuarios, pero estima que sus pérdidas operativas seguirán siendo de entre 230 y 330 millones de dólares.

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