Han pasado seis días desde el cierre parcial del gobierno de Estados Unidos (el conocido como shutdown en inglés) luego de que republicanos y demócratas no llegaran a un acuerdo sobre el presupuesto del país.
Los demócratas rechazaron la exigencia de US$5.700 millones del presidente Donald Trump para construir un muro en la frontera con México.
Trump advirtió que el país atravesaría un cierre de gobierno "muy largo" si no le dan los recursos para cumplir una de sus grandes promesas de la campaña.
En la práctica, el gobierno federal ha cerrado temporalmente algunas oficinas federales y ha suspendido el pago del salario de cientos de miles de funcionarios públicos por falta de fondos.
Muchos turistas que llegaron a parques nacionales y a algunos sitios de interés en ciudades como Washington D.C., la capital, se encontraron con la sorpresa de que estaban cerrados, aunque algunas atracciones como la Estatua de la Libertad de Nueva York permanecen abiertas gracias a recursos desembolsados por los propios estados.
¿Cómo llegaron a esta situación?
No deja de ser sorprendente que el país más rico del mundo se quede sin recursos para asegurar el funcionamiento de las agencias federales.
Todo se debe a un mecanismo legislativo que opera desde hace poco más de cuatro décadas y que ha provocado el cierre del gobierno en 21 ocasiones.
Aunque el primer shutdown ocurrió en 1976, no fue hasta comienzos de la década de los 80 que realmente tuvieron efectos prácticos, cuando el fiscal general Benjamin Civiletti hizo una interpretación más estricta de la norma "Antideficiency Act", de 1884.
Esta ley prohíbe que las agencias federales sigan funcionando en ausencia de una aprobación presupuestaria decidida por el Congreso, para evitar gastos en exceso de los fondos asignados.
Esa misma ley establece excepciones del cierre de servicios cuando se trata "emergencias que comprometen la seguridad de la vida humana o la protección de la propiedad".
El de ahora es un cierre parcial de gobierno, dado que el Congreso aprobó el 70% del gasto, pero aún están pendientes los presupuestos para el Departamento de Estado, Agricultura, Justicia, Transporte, Tesoro, Interior y Seguridad Nacional.
El mayor "shutdown" de la historia
El mayor shutdown en la historia ocurrió en 1995, durante la presidencia del demócrata Bill Clinton, cuando la administración central estuvo sin financiación por 21 días.
El cierre registrado en octubre de 2013, durante la presidencia de Barack Obama, llegó a durar más de dos semanas, con cerca de 800.000 empleados federales suspendidos de sus funciones.
Actualmente siguen funcionando los programas federales sobre pensiones y atención médica, al igual que el Ejército y la Marina, la Patrulla Fronteriza, la Guardia Costera, el Poder Judicial federal, el control del tráfico aéreo, el Servicio Postal y la seguridad aeroportuaria.
Se calcula que unos 400.000 empleados del gobierno se quedaron forzosamente en casa sin recibir sueldo, y en algunos casos, trabajando sin remuneración.