En la medida que las tensiones siguen escalando entre Estados Unidos e Irán, la preocupación sobre el futuro del suministro de petróleo en una de las regiones más ricas en este recurso natural impulsan su cotización a esta hora.
Después de que se conociera que Irán atacó una base militar norteamericana en Irak, en represalia al asesinato del general Qassem Soleimani por parte de EEUU, los futuros del crudo escalaron agresivamente más de 4%, pero esta mañana los movimientos son más contenidos.
Los futuros del crudo tejano WTI avanzan 0,38% hasta los US$ 62,94 por barril en el mercado de commodities de Nueva York, mientras que la unidad de petróleo Brent avanza 0,78%, a US$ 68,80 por barril, en Europa.
Esto mantiene la tónica del mercado de crudo de los últimos días, desde que se conoció de la muerta del general en un ataque aéreo: movimientos bruscos que acompañan a las noticias, seguidos de una bajada en las ansiedades de los inversionistas.
De todos modos, se espera que la volatilidad continúe, mientras que los capitales vuelcan su atención a la respuesta de Estados Unidos.
La clave en el mercado del petróleo es el futuro del suministro, especialmente lo que suceda con el Estrecho de Ormuz, que comparten Irán y Omán y que corresponde al paso más importante en el mundo del crudo.
Un bloqueo del estrecho, y/o una serie de ataques sistemáticos a plantas petroleras de otros países del Medio Oriente -como Arabia Saudita, principal aliado de EEUU en la región e importante productor del llamado oro negro- podría poner en apuros la oferta a nivel global, elevando los precios.