Yulio, el perrito de Aduanas que protegió las fronteras de Chile se retira tras 5 años de servicio.

El querido can llegó en el año 2013 a la Aduana Regional de Coyhaique, siendo el primer ejemplar detector de drogas y otras sustancias. Con el correr de los meses pasó a formar parte fundamental de los equipos de fiscalizadores del Servicio Nacional de Aduanas en la Región de Aysén.

Durante más de 5 años y medio Yulio protegió las fronteras de Chile no solo en la Patagonia, sino también en la Zona Centro y Norte del país como protagonista de decenas de procedimientos que evitaron el ingreso al país de drogas y otras sustancias ilícitas.

Nació un 14 de febrero y fue entrenado en la escuela de adiestramiento canino del Servicio Nacional de Aduanas y luego asignado a la Región de Aysén, pasando a formar parte de los más de 30 binomios caninos que están desplegados en todo Chile y que son claves para el exitoso desarrollo de las fiscalizaciones.

Este binomio canino cumplió funciones en todos los puntos de control y pasos fronterizos de la región, incluido el Aeropuerto de Balmaceda, destacándose por su efectividad. Asimismo, Yulio y su guía también participaron en actividades de prevención del uso y consumo de drogas en distintos colegios y en plazas ciudadanas.

Además de mantener una activa participación en procedimientos conjuntos con las policías en la lucha contra el narcotráfico, les tocó viajar a otras regiones de Chile para apoyar el trabajo integral de fiscalización que realiza el Servicio Nacional de Aduanas.

También participó de eventos especiales como el Rally Dakar en el norte; viajeros por Copa América en el Paso Los Libertadores, en Los Andes; Fiesta de la Tirana en la Región de Tarapacá; o la visita del Papa Francisco a Chile en enero del 2018.

Entre los distintos procedimientos exitosos que lideró este binomio, destacan hallazgo de drogas en formato líquido dentro de botellas de whisky, en personas fajadas, en ovoides y en envases de mayonesa y mostaza.

Luego de cumplir su ciclo como funcionario de Aduanas, Yulio pasó a retiro el 31 de diciembre del 2018, de acuerdo a las políticas del Servicio para la protección de la salud de los ejemplares caninos, y fue entregado en adopción a una funcionaria del Servicio quedando al cuidado de su nueva familia en la ciudad de Coyhaique.

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