Los últimos días se ha dado a conocer un supuesto desafío que incita a los adolescentes a consumir un medicamento y tratar de noquedarse dormidos: el clonazempan, que se vende sólo con receta retenida.

El doctor Juan Carlos Ríos, director del Centro Toxicológico de la Universidad Católica explicó los riesgos de este "reto" en T13 AM y advirtió que los padres deben estar muy atentos, ya que "es una moda que llegó y hay que tener una señal de alerta". 

Ríos señaló que el uso del medicamento, en general no está indicado en niños, y en ese sentido ellos están asumiendo un riesgo. 

"Ellos creen que esto es un juego y no lo es, existen riesgos importantes para la salud de ellos, además este tipo de medicamentos, si bien los efectos iniciales que ellos piensan que están buscando que es dormirse, si se mezclan con otras sustancias o la dosis que usen es muy elevada, porque no saben cuál es el miligramaje, que es la cantidad que tiene cada comprimido de esto, les puede provocar un efecto que nosotros llamamos depresión respiratoria y esto puede llevar a la muerte", declaró el toxicólogo. 

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También advirtió que muchas veces los niños suelen sacar Clonazepam de la casa sin que los padres se enteren y señala los efectos que pueden dar cuenta de que un hijo esta bajo los efectos del remedio.  

"Primero va a hablar como con la lengua traposa, como si estuviera borrachito, va a tener dificultad en la marcha, va a tener mucho más sueño, cuando siempre sabemos que nuestro hijo a la edad joven en la tarde no tienen ningún interés en dormir, están muy activos, todos esos síntomas nos pueden ayudar como padres a tratar de identificar y por supuesto tener un control muy estricto de estos medicamentos en la casa", afirmó. 

Lo que busca el desafío es ver quién logra permanecer más tiempo despierto, por eso explica el doctor que la dosis que pueden alcanzar es muy elevada. 

Además, alertó que la semana anterior se dieron cuenta de otro reto con otro medicamento mucho más peligroso que según él se pudo haber confundido con el Clonazepam. Por ingesta de Clozapina, todavía hay un niño hospitalizado. Dicho fármaco puede provocar síndrome neurolaptico maligno, que tiene alta mortalidad. 

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