"Son probabilidades extremadamente bajas". Así lo resume el jefe de la Unidad de Paciente Crítico de Clínica Indisa, Sebastián Ugarte, al abordar la probabilidad de sufrir una trombosis -obstrucción de una arteria o vena por un coágulo en la sangre- como consecuencias de haber recibido la vacuna de Oxford/Astrazeneca contra el COVID-19.
Un tema que ha generado interés a raíz de la decisión del ISP de aprobar el uso de esta vacuna en Chile, pero acotar el uso de este esquema a mujeres mayores de 55 años. Esto considerando que si bien el riesgo de sufrir trombos es extremadamente bajo -86 casos entre 25 millones de vacunados- los casos se han presentado en mujeres menores a esta edad.
Consultado sobre este tema, Ugarte explicó que la vacuna "ha tenido eventos adversos, pero hablamos de 4 casos en un millón de personas vacunadas". Esto, en el peor de los casos, porque otros cálculos cifran el riesgo en 1 por un millón, similar al riesgo de morir por el impacto de un rayo.
"Esos efectos adversos afectan a ciertos tipos de personas, considerando la edad y el género uno puede definir quienes tienen menor y mayor riesgo, y de esa manera sacar el mejor balance de beneficio sanitario versus el riesgo", explicó.
En este sentido, detalló que así como hablamos de 4 casos de trombos en un millón, la posibilidad de morir por COVID-19 es de 800 personas en un millón.
Y agregó: "la posibilidad de sufrir un evento adverso es muchísimo más baja que, por ejemplo, tener una reacción alérgica a la penicilina, el riesgo por uso de anticonceptivos, por uso de tabaco".
El riesgo real de vacunarse, en cifras
De acuerdo a datos del Winton Centre for Risk and Evidence Communication citado en un artículo de la BBC, la posibilidad de sufrir un trombo producto de vacunas es extremadamente menor que la de otros eventos, como morir producto de un accidente de tránsito o similar a la de ser alcanzado por un rayo.
-Daño grave por efectos secundarios de la vacuna: 4 en un millón para personas de 55 años, 11 en un millón para quienes tienen 25 años.
-Morir de COVID-19: 800 en un millón para personas de 55 años, 23 en un millón para personas de 25.
-Morir en un accidente automovilístico: 23 en un millón para personas de 55 años, 38 en un millón para personas de 25.
-Se alcanzado por un rayo: 1 en un millón, para ambas edades.
-Sufrir un trombo por uso en anticonceptivos: 4 en 100 mil
Pero a esto debemos sumar otro dato: el riesgo de morir producto de una trombosis como consecuencia del COVID-19 es del 40%, versus la de un 0,01% que tiene una persona sin COVID-19 de morir por esta misma causa.
"Claramente si alguien quiere prevenir trombosis, le sale más a cuenta vacunarse", explicó a LUN el jefe de Hematología del Hospital de la Universidad de Chile, Guillermo Conte.