Un galpón ubicado en pleno centro de Santiago, región Metropolitana, fue por meses la guarida de un grupo de secuestradores y narcotraficantes venezolanos indocumentados, conocidos como los "Secuestradores del Taladro".
En un video de 2022, se aprecia cómo tres individuos se bajan de un vehículo para comprar droga, sin embargo, los vendedores tenían otro planes: parte de la banda sale y se apodera del auto de las víctimas.
Luego, ocultaron el vehículo en el galpón, donde los dos hombres y una mujer, todos chilenos, permanecían retenidos.
Tras esto, la banda criminal se trasladó con las víctimas hasta unos departamentos ubicados en Bajos de Mena, Puente Alto.
Allí, torturaron a través de diferentes métodos a sus víctimas, como con un taladro, con el que utilizaron para aplicar dolor a las personas.
"Los trasladan hasta un departamento en Bajos de Mena, comuna de Puente Alto. Donde es sometido a distintas torturas uno de ellos, incluso mediante el uso de un taladro, intentándolo asfixiar en reiteradas oportunidades", detalló el subpreferecto Hassel Barrientos, jefe BIPE Antisecuestros de la PDI.
"Uno de ellos utilizó un taladro para perforar el pie de una de las víctimas, lo que no logró porque la lona de la zapatilla y el calcetín trabaron el taladro", señaló Rodrigo Barrera, vocero Fiscalía Centro Norte.
El líder de banda de secuestradores que torturaba con taladro
Uno de los líderes de la banda criminal es Nelson Bello Gómez. Se trata de quien ordenaba las golpizas y torturas. Luego, enviaba fotos y videos a Venezuela, desde donde se contactaban con las familias de los secuestrados para extorsionarlos.
"Estas personas pertenecían a una facción del Tren de Aragua en nuestro país. Células que operan en nuestro país ejecutando diversos delitos", sostuvo el jefe BIPE Antisecuestros de la PDI.
A pesar de todas las amenazas la banda no logró el pago de los 5 millones que pedían de rescate y por eso intentaron transferir el auto de las víctimas, pero tampoco pudieron porque el vehículo tenía multas sin pagar.
Al final terminaron liberando a las tres personas en la comuna de Renca y sin lograr un peso. Eso marcó el último de sus delitos porque la PDI logró capturarlos.
Tras dos años de investigación, este martes los siete miembros de la banda fueron sentenciados a 15 años de cárcel.
La fiscalía mantiene bajo investigación a otras bandas de similares características, donde también esperan lograr condenas, como las que tendrá a esta banda de venezolanos fuera de las calles por 15 años.