El Servicio Nacional de Geología y Minería (Sernageomin) declaró este viernes en Alerta Amarilla al complejo volcánico Planchón-Peteroa, ubicado en la comuna de Romeral, región del Maule. El macizo colinda además con el Departamento de Malargüe, en la provincia de Mendoza, Argentina.
Según se informó, el poblado más cercano corresponde a Los Queñes (a 30 km), donde se unen el río Claro (proveniente del volcán) y río Teno. En Argentina no hay poblados cercanos, pero sí control fronterizo y Baños del Azufre a 8 km del complejo volcánico.
La institución técnica precisó que la causa de esta escalada en el sistema de alertas volcánicas se debe al incremento acumulado de la sismicidad (de Largo Período) en enero del año en curso, con lo cual el mencionado volcán superó su umbral de actividad de línea de base habitual.
Esto implica, según se informó, tránsito de fluidos al interior de los conductos volcánicos, pese a lo cual aún no se han registrado o recibido reportes de anomalías a nivel superficial.
“Aunque los eventos registrados presentan bajos niveles de energía, el aumento en su ocurrencia, sugiere variaciones en el nivel base de la actividad del volcán. Por ello se estima que existe la posibilidad de la ocurrencia de pequeñas emisiones de cenizas volcánicas. Sobre la base de lo anterior se ha resuelto que la alerta técnica se cambia a nivel Amarillo”, señaló la institución.
Mapa de peligros volcánicos
Según consta en el mapa de peligros, el complejo volcánico Planchón-Peteroa, posicionado en el número 15 del ránking de peligrosidad de los volcanes activos de Chile, está conformado por el volcán Planchón (más nuevo, situado al norte) y el volcán Peteroa, ya extinto, ubicado al sur. Entre ambas cumbres, distantes a 5 kilómetros, se emplazan varios cráteres adicionales.
El complejo contiene en su interior un sistema hidrotermal, compuesto principalmente por agua, gases y especies químicas disueltas, el cual es termalmente calentado por la fuente de calor subyacente. Esto explica que la actividad de línea de base (habitual) de este volcán considere la emisión de vapor de agua y cenizas volcánicas, a causa de la interacción entre sistema hidrotermal y una fuente de calor profunda.
En los años recientes, el volcán Planchón ha tenido una serie de reactivaciones freáticas (asociadas a gases y agua), sin que se haya podido apreciar la emisión de nuevo magma luego de la erupción de 2011.
En la actualidad, el macizo presenta en su cima una actividad fumarólica de vigor intermitente, abundante en vapor de agua y con ocasional emisión de ceniza fina de erupciones anteriores.
