El próximo 2 de mayo se conocerá la sentencia contra Mauricio Ortega, único imputado de la brutal agresión contra Nabila Rifo. Esta jornada el tribunal oral en lo penal de Coyhaique lo declaró culpable de los delitos de femicidio frustrado y agresiones graves y gravísimas contra su ex pareja. Sin embargo, el desestimó condenar al imputado por el delito de mutilación, como solicitaba la fiscalía.
El tribunal, además, declaró culpable al imputado del delito de violación violenta de su morada, no así las amenazas de quemarla y herirla con un hacha.
¿Cuáles fueron los argumentos para declarar culpable Ortega? Este es el detalle
Femicidio frustrado y lesiones graves
La fiscalía acusó que la madrugada del 14 de mayo de 2016, Ortega y Rifo se encontraban al interior del domicilio que compartían junto a otras personas. Debido a la ingesta de alcohol se inició una discusión entre ambos.
De acuerdo a la acusación de los fiscales, Ortega insultó, amenazó y agredió a la víctima, motivando que ella huya del lugar alrededor de las 6 de la mañana, siendo alcanzada por Ortega quien la golpeó "en reiteradas oportunidades en su cabeza y cuerpo con trozos de concreto causándole lesiones de tal magnitud (fracturas, traumas lesiones cortantes, etc) que le provocaron compromiso de conciencia y riesgo vital".
"Como acto seguido el acusado volvió sobre la víctima y con un elemento punzante procedió a sacar sus globos oculares, provocando su pérdida total e irreversible de su visión", acusó la fiscalía.
En relación a las imputaciones de la fiscalía, el tribunal declaró culpable a Ortega del delito de femicidio frustrado y de lesiones graves y gravísimas, en el grado de consumado. Sin embargo, descartó la agravante de alevosía invocada por el gobierno, que es querellante en la causa.
El dictamen señaló que durante el proceso fue acreditado el lugar, la hora y la forma en que fue encontrada la víctima, así como las lesiones que tuvo. "La ofendida perdió la conciencia al recibir el tercer golpe en la cabeza", relató el juez.
Del mismo modo, se detalló que "según las declaraciones de funcionarios de Carabineros y de emergencia que llegaron a auxiliar a la víctima, fueron encontradas unas llaves de vehículo con sangre de la víctima y dos pedazos de concreto con sangre y cabello de la víctima" lo que "constituye un indicio serio respecto al origen del instrumento empleado en la agresión, que lo vincula con el acusado Mauricio Ortega".
¿Cómo se acreditó que fue él quien le propinó los golpes? El tribunal relató que los testimonios coinciden con el relato de Rifo. A esto se suma que, según se acreditó en el juicio, las llaves con que fue agredida "eran del acusado". Además, "el acusado prestó una declaración que resultó poco creíble", aseguró el juez.
La decisión de declarar culpable a Ortega de estos dos delitos fue de mayoría, no unánime. Según el juez que votó en contra, no estaría acreditado que Mauricio Ortega hubiera participado en los hechos.
"No hay prueba de ADN que vincule de manera concluyente al acusado con la autoría de este delito. Al final, tenemos dos versiones de la víctima que se contraponen", dijo el juez que votó en contra.
La fiscalía pide una pena de 12 años y 183 días para los delitos de femicidio frustrado, y otros 12 años y 183 días para las lesiones graves y gravísimas.
¿Por qué se desestimó la mutilación?
Según relató el juez, las declaraciones de los médicos sobre las heridas que tenía Nabila Rifo señalan que la gravedad estaba dada por otras lesiones y no por la extracción de los ojos. En el fondo, que el peligro de muerte estaba dado por el conjunto de las agresiones.
La definición del tribunal supone un revés para la fiscalía, que buscaba pedir 15 años por este delito. Al decretarse las lesiones graves, se solicitó una pena menor.
Revisa la explicación del tribunal
Culpable de violación de morada, pero absuelto de amenazas
En su acusación, la fiscalía relató que a las 7:30 horas del 5 de junio de 2015 Ortega llegó hasta el domicilio de su ex pareja. El sujeto portaba un hacha con la que golpeó la puerta principal del inmueble, la que no pudo abrir. De acuerdo al relato, el imputado se dirigió a la puerta de la cocina la que destruyó logrando su cometido en contra de la voluntad de Rifo, a quien amenazó de muerte y que quemaría su casa. Un hermano de la víctima logró tranquilizar la situación y convenció a Ortega de retirarse del lugar.
Es por estos hechos que el Ministerio Público pidió declarar culpable a Ortega del delito de amenazas y irrupción violenta de la morada. Sin embargo, el imputado fue absuelto del primer delito.
"La irrupción violenta al interior del inmueble resultó acreditada, no así las amenazas de quemarla y herirla con un hacha", señaló el magistrado.
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