En una de las últimas entrevistas concedidas por el mandatario Sebastián Piñera antes de terminar su mandato, aborda el proceso constituyente y sus reflexiones sobre la instancia que busca redactar una nueva constitución.
Ante la consulta de si se arrepiente de haber abierto la puerta al proceso constituyente luego del estallido social, el presidente Piñera señala que: “La alternativa era atrincherarse en la constitución del 80, que llevábamos 40 años discutiendo y reprimir con fuerza la violencia. Pensé que el camino del diálogo político, en democracia y Estado de Derecho, era mejor para Chile, no me arrepiento”.
En entrevista con El Mercurio, dice que espera que la constitución sea un gran marco de unidad que permita “el desarrollo integral, inclusivo y sustentable”, y confiesa que le preocupa “este afán refundacional, Chile tiene una historia, o comienza con la convención constitucional. Hay una actitud identitaria, todo se reduce a situaciones de personas o grupos y se olvida el bien común”. dice el mandatario.
Sobre el futuro de la convención, señala que “tengo esperanza y fe en que aún estamos a tiempo de enmendar el espíritu de la Constitución”.
El presidente Sebastián PIñera,confiesa que le preocupa que en la nueva carta magna “se debilite la libertad de expresión, esencial para la democracia y un país libre”, y agrega que “una constitución no es para un momento, en la historia del país o para un grupo que logra juntar transitoriamente mayorías, es para todos y con proyección en el tiempo, espero que salga una buena, no tiene ninguna sentido apoyar una mala constitución” .
