Se agrava la situación de María Inés Contreras (68), la chilena amputada en Cancún, México. Su familia aseguró sentirse abandonados por las autoridades chilenas.
Ignacio Bermúdez, director del Hospital General de Cancún, comentó a T13 que "la presión arterial empezó a caer, la frecuencia cardiaca también y esto nos hizo ver que empezaba a generar nuevamente inestabilidad y falla a nivel cardiovascular, respiratorio, renal y hepático".
"Esta mañana solicitamos a que la familia autorice nuevamente ponerla en sedación, debido a que el fallo y el sufrimiento eran importantes", añade Bermudez.
El médico aseguró haberse comuniado por el caso con el ministro de salud Emilio Santelices y el cónsul chileno en México, Fernando Berguño. Comenta que "el señor ministro es intensivista y sabe perfectamente la dinámica de evolución que requiere un paciente en estado critico y le he informado por segunda vez en este día de la situación que actualmente acontece".
En conversación con T13 además uno de los hijos de Contreras, Fabián Valderrama, comentó que se sienten abandonados por las autoridades chilenas y el consulado.
Valderrama confesó que "estamos totalmente destrozados, van 20 días en esta situación y estamos totalmente abandonados, y seguimos abandonados".
"Toda esta situación es por la incompetencia y el abandono por parte del Gobierno de Chile hacia su gente. Ya que hace diez días atrás nosotros informamos, solicitando el traslado y ahora ya es demasiado tarde. Espero que el Gobierno de Chile se haga responsable ante la opinión pública", agregó Fabián a T13.
