Como si el coronavirus no fuera suficiente, este 2020 ha traído una serie de hechos curiosos relacionados al mundo animal. A los avistamientos de pumas en la Región Metropolitana, ahora se suman el ingreso de sapos y ranas a la región de Los Lagos.
Todo comenzó hace un par de semanas cuando un habitante de Puerto Montt consultó en Facebook acerca de la identidad de un sapo que venía en una caja que llegó como encomienda a su casa, proveniente desde China.
Desde Guangdong, ciudad ubicada en el sur de China, viajó durante un mes dicha encomienda que llegó a fines de septiembre a Puerto Montt. El receptor había comprado un equipo de buceo y al abrir la caja, se encontró con el anfibio vivo de aproximadamente 5 centímetros.
El director del Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) de la Región de Los Lagos, Eduardo Monreal, indicó que “al momento de recibir la caja y abrirla [la persona] se encontró con un sapo vivo en la tapa. Esta era una compra realizada en China, a través de una plataforma de comercio electrónico”, consignó LUN.
Según el organismo, entre septiembre y noviembre de este año han ingresado a dicha región siete ranas y dos lagartijas vivas al interior de encomiendas y cargas procedentes desde Estados Unidos y China.
El herpetólogo y profesor del Instituto de Ciencias Ambientales y Evolutivas de la Universidad Austral, Felipe Rabanal, dijo que ellos avisaron al SAG “para que se hiciera cargo del ejemplar. Luego, nos enviaron fotografías de mejor calidad y detalle, y a partir de ellas pudimos identificar que era un ejemplar de la especie Bufo cryptotympanicus”.
En este sentido, el profesional detalló que esta especie, conocido como sapo, se distribuye en el norte de Vietnam y el sur de China, en las provincias de Guangxi, Yunnan y Guangdong. Además, tiene la piel seca, rugosa, con microcorniflcaciones, que son como pequeñas espinas que tapizan la piel.
Por otro lado y sobe la peligrosidad de que lleguen estos ejemplares a nuestro país, Monreal aseguró que es preocupante, ya que “estas especies llegan a un ambiente al cual se pueden adaptar perfectamente, y sin depredadores, se reproducen en forma descomunal alterando la biodiversidad de la zona (…) además, podrían ser portadores de alguna enfermedad que afecte a nuestra producción ganadera, a la fauna de alguna zona o incluso al ser humano”, cerró.
Fotografía principal del artículo es referencial.