Una mujer de 36 años de Putaendo, región de Valparaíso, acusó que se le está cobrando una multa y deberá cumplir reclusión nocturna por no haberse presentado como vocal de mesa en las elecciones primarias de noviembre pasado, cuando la ciudadanía escogió a sus candidatos a alcalde o gobernadores de distintas comunas.
Karina Aguilar aseguró que al enterarse que debía ser vocal de mesa en noviembre pasado se intentó contactar con la Junta Electoral y el Servicio Electoral (Servel) para excusarse de cumplir con su obligación, sin embargo, no tuvo respuesta de sus correos electrónicos.
Aguilar pertenecía justamente a los grupos de riesgo que fueron incluidos por el Servel que podían excusarse de ser vocales de mesa, al enfrentar un embarazo de alto riesgo, pero este motivo debía justificarlo en la citación posterior al juzgado de policía local.
La mujer, que hoy tiene siete meses de embarazo, fue citada a excusarse, sin embargo, asegura que llegó tarde a esta citación porque tenía un control médico en San Felipe el mismo día, precisamente por su embarazo.
“Estoy siendo afectada por la mala aplicación del derecho. Yo me presenté el 22 de febrero en el Juzgado de Policía Local de Putaendo. Llegué atrasada porque justo ese día tenía control de embarazo de alto riesgo en San Felipe y no pude llegar a la hora. Cuando llegué el juez no pudo leer mi correo y me dijo que tenía cinco días para hacer una reconsideración presencial”, relató en conversación con T13.
En ausencia de Aguilar, el juez la sentención a pagar dos Unidades Tributarias Mensuales (UTM), cerca de 102 mil pesos, aunque tenía la posibilidad de apelar.
“Ese mismo día, en la noche, le hago llegar en formato PDF mi reconsideración, en la que ruego que se considere la anulación de la multa cursada y le entrego todos los antecedentes médicos por escrito que yo estaba embarazada, lo que me eximía de ser vocal”, agregó.
De todos modos, el juez determinó que la mujer debía pagar una multa, aunque esta vez de 25 mil pesos, pero Aguilar tampoco accedió.
“No corresponde porque yo estaba eximida. Había un acuerdo nacional de que las embarazadas estaban justificadas”, dijo la mujer.
El pasado viernes se dictó una orden de detención en contra de la mujer, quien debería cumplir dos noches de reclusión nocturna.
