Carabineros de Chile incautó dosis de brolamfetamina DOB en medio del operativo que desbarató una organización criminal que traficaba droga desde Cali, Colombia, y que era distribuida en el Persa Bío Bío, en Santiago.
Fue durante este lunes que se dio a conocer el procedimiento en que se incautaron aproximadamente 386 kilos de distintos tipos de drogas, avaluadas aproximadamente en $4.600 millones de pesos.
En el detalle, se incautaron poco más de 385 kilos de marihuana, 5.520 comprimidos de clonazepam, 1.205 dosis de LSD, 308 pastillas de MDMA (éxtasis), 209 ampollas de efhedrina, 107 ampollas de fentanillo, 106 catridge de aceite de hachis, 64 gramos de clorhidrato de cocaína, 85 gramos de pasta base de cocaína, 72,6 miligramos de ketamina, 5 frascos de vidrio contenedores de brolamfetamina DOB, 424 masticables de una sustancia no determinada y 70 pastillas tipo éxtasis de una sustancia no determinada.
A raíz de lo mismo, se detuvo a cuatro hombres y dos mujeres, de los cuales cinco estaban con situación migratoria irregular.
Brolanfetamina, la "droga del miedo"
El capitán Pablo Ardiles, del OS-7, manifestó que "nos llamó la atención una sustancia que no teníamos identificada inicialmente, pero al analizarla logramos detectar que se trataba de brolamfetamina DOB".
"Normalmente, la gente la consume vía oral en gomitas azucaradas, que previamente han sido inyectadas con una dosis pequeña de esta sustancia", agregó, precisando que en Argentina la denominan "la cápsula del miedo".
Según recogió LUN, la toxicóloga Laura Börgel manifestó que esta droga es "una variedad de la anfetamina alterada químicamente para prolongar y potenciar su efecto, que es muy similar a la cocaína".
En esa línea, manifestó que produce un aumento de la liberación de adrenalina, llevando al consumidor a un estado súper alterado y con un aumento de las percepciones.
"Cuando tú tienes miedo liberas adrenalina como un mecanismo de defensa para que no te quedes paralizado y puedas reaccionar", afirmó la profesional, precisando que "las respuestas del individuo son exacerbadas a estímulos como el trabajo" y que dependiendo cuán concentrada esté, se pueden generar crisis de pánico.
Incluso en dosis más altas se pueden provocar convulsiones, alucinaciones y hasta paros cardíacos.
