La madrugada de este miércoles se confirmó la muerte de un joven de 22 años tras una confusa detención ciudadana ocurrida en la Villa Renacimiento ubicada en la comuna de Recoleta, región Metropolitana.
Según información entregada por la Policía de Investigaciones (PDI), la víctima estaba junto a un amigo en una plaza del sector cuando sufrieron un intento de asalto. En ese contexto, intentan escapar y uno de ellos se esconde en el antejardín de una de las viviendas.
"Buscando escapar de ellos, la víctima ingresa a un domicilio del lugar, donde la dueña de casa alerta —mediante una alerta comunitaria— y los vecinos del mismo sector salen pensando que esta persona estaba intentando robar", señaló la inspectora Rocío González.
Tras la llegada de Carabineros y personal del Servicio de Atención Médico de Urgencia (SAMU), se constató la muerte del joven en el lugar.
Sin embargo, esta no es la primera vez que una persona muere en el marco de una detención ciudadana. Una situación similar se produjo en junio del año pasado cuando 11 vecinos de Puente Alto quedaron en prisión preventiva por una detención ciudadana que terminó con la muerte de un hombre de 27 años.
En esa ocasión, el fiscal Víctor Oyarzún explicó que los detenidos "se extralimitan absolutamente de lo que es un contexto legal de detención ciudadana, ya que proceden a agredirlo de forma masiva con múltiples golpes de pie, puño, palos y fierros; dejando esta víctima agonizando en el lugar".
¿Qué dice la ley sobre las detenciones ciudadanas?
En la ley 19.696, que establece el Código Procesal Penal, se establece que solo está permitido retener a una persona acusada de algún delito con el objetivo de entregarla a las policías.
En el artículo 125 se detalla que "ninguna persona podrá ser detenida sino por orden de funcionario público expresamente facultado por la ley y después de que dicha orden le fuera intimada en forma legal, a menos que fuere sorprendida en delito flagrante".
Además, se detalla que en el caso que una persona sea sorprendida en flagrancia, solo se le puede retener "para el único objetivo de ser conducida ante la autoridad que correspondiere".
Si una persona que retiene a un presunto autor de un delito incurre en hacerle daño, se transforma automáticamente en el autor de otras faltas y por lo tanto arriesga penas relacionadas a delitos como lesiones y hasta homicidio.
