Fueron 163 los puntajes nacionales en la PSU 2016. De ellos, solo 18 pertenecen a establecimientos municipales. La cifra es solo parte del desglose de los resultados que se conocieron este viernes.
La cantidad de puntajes nacionales en 2016 provenientes de la educación pública presentaron un retroceso respecto de 2015. Si ese año representaban un 16,13% del total, este año solo equivalente a un 10,69%. El resto, proviene de la educación particular subvencionada (20,13%) y particular pagada (68%).
¿A qué se debe esto? Ernesto Treviño, académico de la Facultad de Educación de la Pontificia Universidad Católica y miembro del Centro de Estudios de Políticas y Prácticas en Educación (CEPPE-UC), habló con T13 para esclarecer la baja en los puntajes nacionales de estudiantes provenientes de la educación municipal.
Para el académico, un factor clave ha sido la "fuga" de alumnos hacia otros sectores de la educación.
-En los últimos años se ha producido una baja general en los puntajes nacionales, siendo 2016 el peor resultado en una década. ¿A qué atribuye esto?
"Lo que está sucediendo probablemente es que como la PSU tiene que renovar sus preguntas cada año para que los estudiantes no se las sepan de antemano, las preguntas son más difíciles de contestar, son cada vez más rebuscadas, por eso hay menos puntajes nacionales".
-Considerando los cambios que se han realizado a la PSU, ¿por qué sigue siendo una cifra a la baja?
"Podría que ver con la preparación de los propios estudiantes. Si nosotros vemos la preparación de los estudiantes en términos de otras pruebas como Simce, o pruebas internacionales, hace 10 años que los resultados en educación en general y en educación media están bastante estancados, entonces tampoco ha mejorado la calidad en educación media".
Esto se debe principalmente a una fuga de estudiantes. Aquellos que tienen la posibilidad de asistir a otro tipo de establecimientos, que tienen un poco más de recursos, ya sea materiales o recursos sociales, tratan de abandonar la educación municipal
-¿Tiene que ver con la calidad en la educación básica y media?
"Yo creo que podría tener que ver porque todos los resultados de las pruebas que no son PSU muestran que hace 10 años no han habido mejoras significativas, y en los resultados académicos de los estudiantes si uno ve PISA, si uno ve Simce, distintas pruebas, hemos estado estancados, entonces tampoco es que haya mejorado sustancialmente la calidad en la educación básica y media".
"Tenemos que repensar la forma en que estamos enseñando a nuestros estudiantes si queremos que demuestren mejor sus habilidades en distintos ámbitos, incluidos por supuesto la PSU".
En este sentido, ¿cuál es la relación que podemos establecer con los resultados de la prueba Simce y los puntajes nacionales obtenidos?
"Si nos concentramos en los puntajes nacionales pareciera ser que estamos teniendo como un problema con las pruebas y realmente no es un problema con las pruebas porque los estudiantes representan menos del 1% de los estudiantes que las rindieron".
"La PSU sabemos que necesita mejoras y sabemos que se le han hecho algunas mejoras, pero los resultados que nos muestra se condicen con los del Simce por ejemplo y se condicen también con los resultados de Pisa (...) también tenemos una dificultad como sistema educativo más que como prueba para generar esos aprendizajes de alta calidad".
¿Podemos seguir considerando la PSU como un método válido de selección?
"La PSU es una forma de selección nacional, el problema es que esa prueba, como todas las otras pruebas en el país, se relacionan de manera muy poderosa con el origen social de los estudiantes, y por lo tanto, si uno utilizara solamente esa prueba, castigaría a los estudiantes de menor nivel socioeconómico con el ingreso a la universidad y beneficiaría a los de mayor nivel socioeconómico".
"Este tipo de pruebas tiene que tener un peso relativo en los procesos de admisión y se tiene que combinar con otros elementos como el ránking, por ejemplo, que se ha venido implementando y que puede ser bastante razonable".
"Yo creo que nosotros aún estamos un poco atrasados, y si bien yo no recomendaría por ningún motivo eliminar la PSU por completo, sí lo que diría es que tenemos que modernizar y actualizar nuestros sistemas de admisión para que no sigan perpetuando las desigualdades y más bien le den la oportunidad a aquellos estudiantes que tienen mérito independientemente de su origen social, de ingresar a las instituciones de educación superior que prefieran".
Este año solo 18 puntajes nacionales corresponden a estudiantes provenientes de establecimientos municipales, ¿cómo explicaría esta baja?
"Esto se debe principalmente a una fuga de estudiantes. Aquellos estudiantes que tienen la posibilidad de asistir a otro tipo de establecimiento que tiene un poco más de recursos, ya sea materiales o recursos sociales, tratan de abandonar la educación municipal. Probablemente esto tiene que ver también con la baja de matrícula en la educación municipal, y también con la caída (en puntajes) y eso lo vamos a tener que ver cuando se liberen las puntuaciones totales, una caída o un estancamiento en las puntuaciones de los liceos emblemáticos".
¿Tiene relación con una baja calidad de la enseñanza municipal?
"Más bien es una vulnerabilización de los establecimientos municipales, hay una baja legitimidad social de esos establecimientos".
"Lo ha sucedido y que me parece que ha dañado mucho la educación municipal, son los constantes paros que ha sufrido, y una muy mala apreciación por parte de los padres que prefieren mover a sus hijos si es que pueden y tienen la opción, a otros servicios educativos como las escuelas particulares subvencionadas. Por eso es indispensable hacer algo urgente con respecto a mejorar la educación municipal en todo ámbito de cosas. Y el proyecto de desmunicipalización de la educación pública debería ser prioritario para el gobierno si es que todavía quiere preservar la educación pública del país".