Pareciera un inocente juego en un día como cualquier otro en el jardín infantil Nuestra Señora de La Victoria, en la comuna de Pedro Aguirre Cerda, pero tristemente no lo es.
Es la dramática realidad que a diario viven los niños de ese jardín en la población La Victoria, donde las tías cantan para desviar la atención de los pequeños y no sientan la balacera en la calle.
Todo por el asesinato de un joven de 19 años de edad, con dos órdenes de detención, una de ellas por homicidio, quien fue baleado en medio de un velorio de alto riesgo cercano al jardín.
“Al momento en que estaba ocurriendo la balacera había niños que estaban recién llegando al jardín, en donde ellos venían caminando con sus familias y quedan propensos a ver estas imágenes, a ver a personas con armas”, señaló Sabina Alvear, parvularia del jardín.
En este último episodio de violencia afortunadamente ningún niño resultó herido. Sin embargo, no es el ambiente ideal para crecer para los más de 80 pequeños de este jardín, donde cantar para desviar su atención ya es parte del “protocolo” cuando hay balaceras en la población.