Tras una denuncia, funcionarios del Servicio Agrícola Ganadero (SAG) de Biobío interceptaron la plaga cuarentenaria ausente Erthesina fullo, conocida como chinche apestosa de manchas amarillas, en vehículos importados a través del puerto de Lirquén, adoptando las medidas necesarias para evitar su ingreso al país.
En este sentido, el director regional del SAG de Biobío, Iván Ramírez, destacó que “esta es una plaga de alta peligrosidad para nuestro país, en especial para el sector forestal, ya que es considerada una plaga polífaga. Es una especie succionadora de savia de hojas, ramillas, frutos y flores, que se alimenta de cerca de 60 especies vegetales repartidas en 28 familias botánicas”
Por su parte, el encargado regional del Protección Agrícola – Forestal y Semillas, Rodrigo Ther Alarcón, explicó que “entre las especies de importancia forestal que podrían ser afectadas se encuentran álamos, sauces y pinos. También ha sido reportada como plaga de especies ornamentales como robinia, mayos, acacia de flores sedosas, fresnos, plátano oriental y ulmo, las cuales están presentes en el arbolado urbano de Chile. Además, es considerada plaga de diversos frutales, principalmente manzanos, perales y kiwi”.
Por ello, una vez recibida la denuncia personal del SAG tomó muestras, las que fueron analizadas en el laboratorio institucional de Chillán, determinándose que se trataba de esta plaga ausente en el país, por lo que se procedió a inmovilizar la carga de vehículos importados, instruyendo las medidas sanitarias para estos casos, la que consiste en la aplicación de productos químicos específicos para estos insectos.
“La intercepción oportuna de una plaga es fundamental para evitar su establecimiento en el país, la que muchas veces puede provocar grandes pérdidas económicas para nuestra agricultura, por ello valoramos la denuncia realizada por el personal del puerto de Lirquén, la que nos ha permitido actuar a tiempo en beneficio del sector silvoagropecuario de Chile”, indicó el Director Regional del SAG.
Empresas autorizadas por el SAG han aplicado las medidas sanitarias a más de 10 mil vehículos que ingresaron al país a través de tres embarques.
En este sentido y según detalló Ramírez, se aplicaron productos químicos en el chasís de los vehículos, en los motores y en las cajuelas para que no quedaran los insectos vivos.