La Policía de Investigaciones (PDI) confirmó este viernes que los restos encontrados en un pique minero cercano a Copiapó, correspondían a Marina Cabrera, una de las jóvenes que se encontraban desaparecidas en la ciudad. El supuesto responsable del hecho fue formalizado y quedó en prisión preventiva.
La mujer de 23 años y de nacionalidad boliviana fue vista por última vez el 5 de febrero de 2019, luego de ir a dejar a su hijo a una escuela de verano.
El jefe de la Brigada de Homicidios de la PDI Alfredo Espinoza confirmó la identificación del cuerpo de la joven y aseguró que el caso está directamente relacionado con la desaparición de Catalina Álvarez y la muerte de una peluquera trans.
Hugo Pastén, el hombre de 42 años acusado de ambos crímenes no reconoció el homicidio de Cabrera en la audiencia de formalización, aunque sí dijo estar “parcialmente” informado acerca de lo ocurrido con Álvarez, de quien se comprobó que había estado a bordo del colectivo que maneja el hombre.