Este viernes Chile registró 8.680 nuevos casos de Coronavirus. Se trata del segundo día con peor registro a lo que va de la pandemia, siendo solo superado por el 9 de abril de 2021, día en que se notificaron 9.171 contagios. El nuevo récord ocurre en un día de contrastes: mientras la UCI del Hospital de la UC de Marcoleta tuvo que cerrar su área de urgencia salvo para casos de riesgo vital, miles de personas llegaron al centro de diversiones Fantasilandia, que retomó sus operaciones en el Parque O'Higgins.
Pero además, el peak de casos llega en momentos donde Chile ha superado los 10 millones de personas con al menos una dosis de vacunas para el COVID-19, de las cuales 7,8 millones completaron el esquema de inmunización.
¿Qué pasa que Chile no logra contener los casos? Aunque es sabido que las vacunas previenen los casos graves más que los contagios, el director ejecutivo de Fundación Epistemonikos y director del Centro de Evidencia de la UC, Gabriel Rada, es enfático en que "hay varias explicaciones que se combinan para explicar este fenómeno". Vamos por parte.
1) Relajamiento de las medidas y fatiga pandémica
Para Gabriel Rada -quien es un reconocido experto en medicina basada en la evidencia- hay un relajamiento "que puede haber sido consciente e inconsciente desde el punto de vista de la autoridad".
Entre lo consciente, explica, se encuentran las aperturas, el pase de movilidad y otras medidas decretadas por el Minsal. En lo inconsciente, dice, "el mensaje que se le comunica a la ciudadanía, al poner tanto énfasis en la vacunación, se da una sensación que esta mejorando, que estamos saliendo, y eso hace que se relajen medidas".
"Hay una fatiga de la pandemia, las cuarentenas están siendo menos efectivas", dice, por su parte, Juan Carlos Said, médico internista de la Universidad de Chile, master en Salud Pública del Imperial College de Londres y director de la Fundación América Transparente.
2) La circulación de nuevas variantes, más contagiosas
Rada explica que "hay bastante evidencia de que el tipo de virus que circula es diferente al de hace meses, en particular por la entrada de la variante P1 (brasileña), que parece contribuir a la mayor cantidad de casos y a la mayor gravedad".
3) El efecto estacional
"A medida que bajan temperaturas empiezan a cambiar las actividades, desde el aire libre -que es muy raro tener contagios al aire libre- a actividades al interior", explica el académico de la UC.
En este sentido es clave mantener una buena ventilación de los espacios cerrados. El esquema es sencillo: A mayor ventilación, menor riesgo.
4) Hay avance en la vacunación, pero aún falta mucho
Gabriel Rada advierte que "vemos un efecto muy importante en población vacunada, donde vemos un grado alto de protección".
Sin embargo, advierte: "uno escucha 10 millones de vacunados con al menos una dosis, pero en el fondo queda un porcentaje altísimo de población no vacunada".
De hecho, el plan de vacunación del Minsal proyecta alcanzar a un 80% de la población de aquí a finales del primer semestre. Sin embargo, en las últimas semanas se ha visto un retroceso en el ritmo del proceso, el que ha sido atribuido a un menor interés o disponibilidad de las personas jóvenes para ir a los vacunatorios.
5) Vacunas altamente efectivas para prevenir muertes, pero no tanto para los contagios
Más de un 86% de la población mayor de 70 años ha completado su esquema de vacunación, lo que ha explicado el descenso en las hospitalizaciones en este grupo, que han caído de forma considerable. Y en caso de las muertes, si en enero el 66% pertenecía a este grupo, ahora representan el 52,09%, según datos del DEIS.
Aunque las vacunas suministradas en Chile presentan altos índices para prevenir casos graves y muertes por Coronavirus, la evidencia no es la misma al momento de hablar de prevenir contagios. Al menos no con Sinovac, que es la que se ha utilizado mayoritariamente.
"Uno podría plantear que la vacuna no es 100% eficaz para prevenir los contagios -ninguna lo es- pero esta es una vacuna que no es de las que tiene las efectividades más altas y eso hace que incluso personas vacunadas puedan contraer la enfermedad, no desarrollar enfermedad grave o tener un riesgo mucho menor de enfermedad grave, pero ellos pueden ser un factor de transmisión de la enfermedad", explica Gabriel Rada.
"La Sinovac no es suficiente", es el título de una columna publicada en Ciper por Juan Carlos Said. En dicha columna, el experto en salud pública plantea que una de las explicaciones de por qué no bajan los casos tiene relación con la baja efectividad de Sinovac para reducir la circulación del virus, por lo que plantea la necesidad de alcanzar a un 100% de la población y, para los años que vienen, pensar en esquemas de laboratorios con mayor efectividad para controlar el virus.
Lo primero que aclara Said en conversación con T13.cl es que "esto no es un llamado a no vacunarse con Sinovac, sino que estar consciente de las virtudes de esta vacuna así como de sus debilidades. Y pensando en cuanto haya disponibilidad de vacunas, poder contar con vacunas que sean altamente efectivas. Sino, va a ser muy difícil que rompamos este ciclo".
En este sentido, explica que "empezamos a vacunar una vacuna que si bien es positivo que se use, porque reduce el numero de hospitalizados y fallecidos, no es tan efectiva para cortar el contagio. De hecho, la efectividad para reducir el contagio se estima entre un 50% y un 67%, es decir, tanto como una de cada dos personas que están vacunadas se pueden contagiar, y eso significa que puede potencialmente contagiar a otras personas".
Said agrega que "Sinovac es una vacuna donde 1 dosis no sirve casi nada, es decir, requiere de 2 dosis, mientras que en Israel se está vacunando con Pfizer, que con una dosis ya proporciona mayor protección que Sinovac con 2 dosis, y más encima al administrar dos dosis se logra una inmunidad casi completa, es decir, el 95% de las personas no se contagia".
Aunque aún es temprano para hablar del efecto de las vacunas en los contagios de diferentes grupos etarios, el último informe epidemiológico del Minsal muestra que si bien la incidencia de casos se mantiene alta en los grupos de mayor edad y que muestran mejores porcentajes de vacunación, son los grupos de 20-29 y de 30 a 39 años los que exhiben peores índices de contagio.
"Son factores que se pueden correlacionar; hay discusión si ese efecto que estamos viendo es por solo la vacuna, o hay otros factores, pero la vacuna está siendo parte de ese factor. Eso se conjuga con que con las variantes hay un virus que parece ser más grave en personas que anteriormente no se veían afectadas o afectadas gravemente, como la población joven", explica Gabriel Rada
¿Qué medidas tomar para disminuir el riesgo de contagio?
El alza de casos ocurre en medio de la entrada en vigencia del Pase de Movilidad, con que se autoriza el desplazamiento de personas que han completado un periodo de 14 días tras concluir su esquema de vacunación, sin la necesidad de obtener permisos a través de Comisaría Virtual en comunas en Fase 1 y Fase 2, además de permitir los viajes interregionales a zonas que al menos se encuentren en fase de transición.
"Acá debemos entender que no vamos a estar protegidos hasta que estemos todos protegidos", enfatiza Juan Carlos Said, quien hace un llamado a mantener las medidas de autocuidado pese a haber recibido ambas dosis de la vacuna.
Rada complemente con que "tenemos que tener precaución con la posibilidad de que personas vacunadas puedan transmitir la enfermedad. Eso no está aclarado científicamente, por lo que es recomendable actuar precavidamente, y considerarnos como posibles portadores asintomáticos de la enfermedad".
¿Y si tengo pensado visitar viajar o reunirme con familiares?
Gabriel Rada realiza las siguientes recomendaciones:
Preferir espacios abiertos: "a diferencia de lo que se creía al principio, la transmisión en espacios abiertos es muy rara, ocurre muy rara vez".
Sin embargo, dice, debemos saber que el riesgo es menor, pero no es cero.
Ojo con los viajes: En estos casos, se debe ponderar "la cantidad de tiempo que estaré, la ventilación que tenga ese lugar para mejorar la circulación del aire, y protección".
En este sentido, tratar que los tramos sean lo más cortos posibles: un viaje de 6 horas va a tener un riesgo mayor que uno de 2 horas. Y si se puede preferir transporte personal, mejor.
No cualquier mascarilla: Preferentemente N95 o KN95 y si se usa una quirúrgica recordar que es necesario cambiarla luego de algunas horas (revisar instrucciones del fabricante, pero en general no supera las 4 horas). Y, en lo posible, complementarlo con un escudo facial (el escudo no sirve por sí solo).
Y, considerando el momento en que estamos y el riesgo de las nuevas variables, evitar usar mascarillas de tela o reutilizables, cuya efectividad varía mucho en el caso a caso.