La Corte de Apelaciones de Santiago rechazó el recurso presentado por la defensa de Pablo Mackenna, por lo que se mantendrá en prisión preventiva tras ser formalizado por haber chocado mientras conducía en estado de ebriedad.
Fue durante el sábado 19 de agosto que el periodista y escritor fue formalizado por el delito de conducción de vehículo motorizado en estado de ebriedad con resultado de lesiones leves y daños.
En la oportunidad, la fiscal Patricia Ibarra apuntó que Mackenna fue detenido por personal policial "cuando provoca un accidente de tránsito al no respetar la luz roja y choca contra un taxi provocando daños de consideración en este vehículo y resultando con lesiones el conductor y un pasajero que se trasladaba".
Si bien su defensa intentó impulsar un recurso ante la Corte de Apelaciones para modificar la medida cautelar de prisión preventiva, el Tribunal de Alzada terminó por rechazar dicha solicitud.
Por lo anterior, se ratificó que Pablo Mackenna deba permanecer en prisión preventiva por los 90 días que se desarrolle la investigación.
Durante la audiencia de formalización se le dejó en prisión preventiva al ser considerado un peligro para la seguridad de la sociedad.
Pablo Mackenna "se niega a dejar de manejar cuando bebe alcohol"
Durante la audiencia de formalización del pasado 19 de agosto, la fiscal Patricia Ibarra detalló otros episodios que protagonizó Mackenna. En 1999, fue condenado a 61 días por manejo en estado de ebriedad; en 2005 se le sorprendió conduciendo en similares condiciones, por lo que dictaron 40 días de reclusión nocturna en su contra; y también fue condenado por la misma falta en 2006 y 2014.
"Habla de la conducta previa del imputado que ha sido condenado en reiteradas oportunidades por el delito de conducir vehículos motorizados en estado de ebriedad y a pesar de ello no tiene la capacidad de conducir cuando ha bebido alcohol. Es por esa razón que creemos que él es un peligro para la seguridad de la sociedad", sostuvo la fiscal sobre Pablo Mackenna.
En esa línea, la jueza Karina Acevedo indicó que "en esta causa tenemos a una persona que chocó a un tercero infringiendo, además, la ley de tránsito pasando un semáforo con luz roja, lo que evidentemente es una actitud más riesgosa si hubiese sido una simple conducción en estado de ebriedad".
"Hay un imputado que ha sido reiteradamente condenado por el mismo delito. Ya tenemos cuatro condenas anteriores, la última del 2014 donde él fue condenado por manejar en estado de ebriedad, y que si bien no puede ser considerada para efectos de reincidencia por la prescripción, sí estamos ante una persona que es refractaria del ordenamiento jurídico y que se niega a dejar de manejar cuando bebe alcohol", comentó la magistrada.
"También nos tenemos que fijar en la conducta del imputado y en la forma en que pone en riesgo la vida de terceras personas, lo cual efectivamente pasó el día de hoy (sábado)", complementó.
Al mismo tiempo, indicó que "él chocó a un taxista, para quien además su vehículo es su fuente de trabajo, por lo tanto, él va a quedar sin poder trabajar. Además lesionó a otra persona que iba en el auto".