Los cancilleres de los países miembros del grupo de Lima rechazaron este martes en Santiago el anuncio de la Asamblea Constituyente de Venezuela de adelantar los comicios presidenciales a antes del 30 de abril, por considerar que no permitirá celebrar "presidenciales democráticas".

"Esta decisión imposibilita la realización (de) presidenciales democráticas, transparentes y creíbles", indicó un comunicado leído por el canciller chileno, Heraldo Muñoz, tras una reunión de los ministros de Relaciones Exteriores de los países miembros.

Por su parte, canciller mexicano, Luis Videgaray, anunció que su país del proceso de negociación entre el gobierno de Nicolás Maduro y la oposición. Este país, junto a Chile, han sido garantes de los encuentros de Santo Domingo, en República Dominicana, en un intento por contribuir a que Venezuela salga de la crisis.

"Ante la decisión del gobierno venezolano de convocar a elecciones durante el primer cuatrimestre de este año, el gobierno de México ha decidido no participar" en este proceso, anunció en rueda de prensa.

En tanto, Muñoz indicó que Chile revisará su participación en el grupo de países acompañantes del diálogo venezolano "si se consolida" la anticipación de las elecciones.

Los otros gobiernos que acompañan las negociaciones son los de República Dominicana, Bolivia y Nicaragua, y San Vicente y las Granadinas.

En esta cita se esperaba que Venezuela estuviera en el centro del debate y que se analizaran los informes realizados por los cancilleres de México y Chile.

Esta reunión, la cuarta del grupo que integra a catorce países de la región, se dio en un contexto complejo. Los diálogos que se impulsan entre el presidente Nicolás Maduro y la oposición, fueron suspendidos la semana pasada, aunque "de momento".

Esto, porque los representantes de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) rechazaran continuar con el diálogo después de que el ministro de Interior y Justicia, Néstor Reverol, asegurara que gracias a la información obtenida en estas reuniones se logró desmantelar al "grupo golpista" comandado por Óscar Pérez.

Pérez, murió en una operación policial a las afueras de Caracas y ha tenido un fuerte impacto en la comunidad internacional. Momentos antes había aparecido en cámara herido y denunciando que las fuerzas de Maduro supuestamente no lo dejaban entregarse. El ex policía, recibió una custiodada y polémica sepultura. Organizaciones de derechos humanos alertan de posibles "ejecuciones extrajudiciales".

Previo al encuentro del Grupo de Lima, el chileno José Miguel Vivanco, director de la ONG, Human Rights Watch, señaló que esta entidad "debería imponer sanciones contra funcionarios del régimen venezolano y apelar a instancias internacionales". 

Por su parte, venezolanos residentes en este país habían prometido congregarse para protestar y exigir un pronunciamiento contra la crisis que atraviesa el país. “Haremos un tributo a nuestros héroes caídos, ellos no se rindieron y nosotros tampoco. Mañana es un día emblemático porque Venezuela cumple 60 años del derrocamiento de la dictadura, por eso es necesario que alcemos nuestra voz”, dijo la coordinadora del movimiento Vente Venezuela en Santiago, Verónica Olivieri, según el diario El Nacional. 

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