En prisión preventiva quedó una mujer de 31 años que fue formalizada este jueves por el parricidio de su bisabuelo de 90 años en Pemuco en la Región de Ñuble el pasado 20 de mayo.
Según explicó el fiscal jede de Yungay, Mario Lobos Ortiz, la imputada agredió al anciano con un objeto contundente en diferentes partes del cuerpo, aunque principalmente en la cabeza.
Esto le produjo un traumatismo encéfalo craneano que finalmente le provocó la muerte. Tras el hecho, la mujer habría arrastrado el cuerpo hasta dejarlo oculto entre unos matorrales de un bosque. Además, el fiscal apuntó a las declaraciones contradictorias de la imputada ante la PDI.
Otro de los argumentos, fue la georreferenciación del celular en la zona donde fue hallado el cuerpo de la víctima, así como una mancha de sangre humana hallada en el automóvil de la imputada.
La jueza de Garantía de Yungay, Sandra Rozas Schuffeneger acogió lo planteado por el fiscal, en relación a que la imputada es un peligro para la sociedad por lo que decretó la medida cautelar para la mujer que será derivada hasta la cárcel de Chillán.
Sobre si hay más personas involucradas, el fiscal Mario Lobos señaló que “en estos cinco meses de plazo para la investigación se realizarán justamente diferentes diligencias para establecer todos los antecedentes que permitan esclarecer los hechos de la mejor forma posible”.
Según han declarado familiares a la Fiscalía, la mujer le debía dinero a su bisabuelo de 90 años. Luego de dos meses desaparecido, el cuerpo del anciano fue encontrado este sábado por unas personas que se encontraban realizando labores de caza en el sector de Culenco.
La mujer fue detenida este lunes por la Brigada de Homicidios de la PDI de Chillán y este martes se le controló la detención, la que amplió hasta este miércoles cuando fue formalizada por parricidio.
