El ministro de Obras Públicas, Alfredo Moreno, reconoció que el racionamiento de agua en Chile "es una realidad" y que actualmente se ha redirigido el uso del agua para la agricultura hacia el consumo humano.
En medio del balance hídrico del año, entregado por el titular del MOP, y la encargada de la Oficina de Servicios Climáticos de la Dirección Meteorológica de Chile, Catalina Cortés, Moreno sostuvo que "nosotros nunca hemos descartado un racionamiento, hemos dicho que estamos haciendo todo para evitarlo y lo hemos logrado".
"Históricamente hemos tenido racionamientos de agua y luz en diversas ciudades de Chile frente a situaciones mucho menos difíciles que esta", apuntó.
Y en esa línea indicó que se ha permitido evitar el racionamiento por la redistribución del agua, poniendo como prioridad el consumo humano por sobre la agricultura.
"Si no hubiéramos redistribuido el agua no tendríamos agua para evitar un racionamiento ni en Santiago, ni en Valparaíso ni en otras ciudades", apuntó Alfredo Moreno, enfatizando que "hemos tomado agua que normalmente iría a la agricultura y a otras actividades y esa ha ido a consumo humano".
"En segundo lugar, esto se ha hecho con tiempo, se previó una situación muy difícil y por lo tanto hemos ocupado los embalses que dan respaldo a las grandes ciudades para tenerlos con agua antes de las temporadas de gran consumo, que son las que estamos viviendo ahora", complementó.
De paso, advirtió que "la situación es muy difícil y hay pequeñas ciudades que dependen de napas que están bajando y que podrían tener un problema, cuando son pequeñas se pueden solucionar de una forma, pero cuando son de un tamaño más grande el racionamiento se hace imprescindible".
"No hemos llegado a eso, pero hemos estado muy cerca", reconoció el ministro de Obras Públicas.
"El racionamiento por supuesto que es una realidad y, de hecho, deberíamos haber tenido racionamiento hace muchísimo tiempo si no fuera por las medidas que ya acabo de mencionar y cada litro de agua que se utiliza hoy en las ciudades es un litro de agua que se está dejando de usar en otras actividades donde hemos tenido que tomarlo para asegurar el consumo humano".
De paso, aprovechó de señalar que "aquí todos podemos y debemos hacer un aporte, porque la situación es la peor situación hídrica que hemos experimentado en nuestra historia y todo muestra que esto no va a cambiar fácilmente", recomendando incluso el cambiar la vegetación de las casas que, por ejemplo, tienen pasto.
"Todos los pronósticos indican, para los próximos meses, que no vamos a tener lluvia; y por otro lado, todos los modelos de cambio climático establecen que esta es una situación permanente (…) no es una emergencia transitoria", complementó.