Este viernes el directorio de Codelco decidió iniciar el proceso de cierre de la fundición de la división Ventanas, luego de los episodios de contaminación e intoxicación que se dio en las localidades de Quintero y Puchuncaví.
Decisión que causó polémica por la postura que tomaron los trabajadores, quienes criticaron el accionar de la empresa estatal acusando "falta de inversión" y renovación dentro de la faena.
En esa línea la ministra de Medio Ambiente, Maisa Rojas, en conversación con Mesa Central se refirió al futuro de las empresas contaminantes que se encuentran en el cordón costero de la zona.
"Hay unas que van a salir de todas maneras por el plan de descarbonización, que está asociado a nuestra ley marco de cambio climático", sostuvo la autoridad de gobierno enfatizando en que "esto es un inicio de una relación distinta con los territorios" haciendo referencia a la calidad de vida, ambiental y ecológica en el sector.
Con relación a las críticas sobre la inversión, Rojas detalló que "Codelco sabe hace mucho tiempo que no va a ser suficiente, porque el plan no solamente es gradual y más exigente, sino que se tiene que revisar. Entonces, la evaluación es que en realidad se necesitan 1.000 millones de dólares y ese es el valor de una nueva fundición".
Por eso es que se mostró a favor del cierre de Ventanas, reiterando que es un proceso para que "no sigan pagando los costos los mismos de siempre".
