"Isla de Pascua es críticamente vulnerable al alzamiento de los océanos. Las olas están empezando a alcanzar las estatuas y plataformas construidas por una antigua civilización".
Así comienza un alarmante reportaje especual publicado por The New York Times sobre la Isla de Pascua, ubicada a 3.700 kilómetros de Caldera (región de Atacama).
En el texto (que puedes revisar en español en este link) se da cuenta de los efectos del cambio climático y la subida de los océanos en los moais, las estatuas sagradas que caracterizan a la isla.
Según la cultura rapanui, los moais representan a los ancestros de cada clan y brindan protección a estos mirando siempre hacia donde se ubicaba la tribu. Las plataformas sobre las que están erigidos se llaman ahu y contienen los restos de sus antepasados.
Han pasado cientos de años desde que se levantaron los moais y sus respectivos ahu, donde están los restos de las familias más antiguas de Rapa Nui. Sin embargo, los huesos de esos isleños están saliendo a flote debido a la fuerza de las mareas contra el borde costero, incluso Naciones Unidas lazó una advertencia sobre el efecto de la erosión en el borde costero.
De acuerdo al reportaje, los modelos climáticos preven que para 2100 el nivel del mar aumente 1,5 metros en la isla. “Te sientes impotente con todo esto, que no puedes proteger los huesos de tus propios ancestros”, dijo Camilo Rapu, líder de los Ma’u Henua.
El mismo Rapu destaca que las estatuas tienen un fuerte valor turístico y que "no queremos que la gente vea estos lugares solamente en fotografías viejas".