Tres niños de entre tres y diez años son los primeros beneficiados por la inclusión de la bomba de insulina en la Ley Ricarte Soto, que costea tratamientos de alto costo para 14 problemas de salud.
El procedimiento de instalación se realizó en el hospital San Borja y contó con la presencia de la ministra de Salud Carmen Castillo. Los favorecidos son Isabella (10 años), Cristóbal (8 años) y Thomas (3 años)
En la actividad, Castillo expresó que "la Presidenta Bachelet nos instruyó a que hiciéramos la Ley Ricarte Soto, y hoy se le está dando la posibilidad a 846 personas, independiente de su previsión y condición social, de recibir este tratamiento".
¿Qué es una bomba de insulina?
La bomba de infusión continua, más conocida como bomba de insulina, es un aparato que administra durante las 24 horas del día insulina ultra-rápida a los pacientes con diabetes mellitus tipo 1, lo que se conoce como tratamiento intensificado, ya que imita la secreción fisiológica de la insulina.
Sin la Ley Ricarte Soto, el costo particular de la bomba de insulina con sensor en pacientes DM1 inestables severos es aproximadamente de $8.341.856, incluyendo el valor de la bomba, el sensor y los insumos anuales.
Desde el Minsal reportan que hasta el 30 de abril de 2017, más de 5 mil personas habían recibido tratamientos financiados por esta iniciativa.