La congregación de Jesuitas rechazó "la violencia y arbitrariedad en el actuar del Estado de Chile y de Carabineros durante el desalojo de las municipalidades en la región de la Araucanía, hoy en particular la Municipalidad de Tirúa (región del Biobío), que se encontraba ocupada pacíficamente".
El municipio fue desalojado durante la mañana de este jueves luego que un grupo de comuneros mapuche se tomara el lugar en apoyo a los detenidos en huelga de hambre.
Además, la congregación confirmó que el sacerdote jesuita "Carlos Bresciani y dos comuneros fueron detenidos por un grupo de Carabineros, sin provocación previa. Nuestro compañero se trasladó esta mañana hasta la municipalidad porque los comuneros le pidieron su presencia ante el inminente desalojo de fuerzas policiales y el uso desproporcionado de la fuerza".
"El padre Carlos fue detenido injustamente, como lo han sido cientos y cientos de mapuche a lo largo de la historia. La violencia del Estado es el signo más claro de la ausencia de voluntad política para resolver los problemas de fondo de este pueblo", agregó la congregación.
Desde Carabineros afirmaron que el sacerdote fue detenido por oponerse a la acción policial y no resultó lesionado durante el operativo. Sobre el desalojo señalaron que se detuvo a tres personas y "se instó a los manifestantes a deponer la toma ilegal" previo al procedimiento.