Ya son cuatro las vacunas contra el COVID-19 que cuentan con la autorización del Instituto de Salud Pública (ISP), luego que este miércoles se aprobara el uso de emergencia de la vacuna Convidecia desarrollada por el laboratorio CanSino.
La vacuna de CanSino funciona a través de un método de vector viral, es decir, utiliza un adenovirus de resfrío común inactivado y que no tiene la capacidad de infectar.
Una de las particularidades de esta vacuna es que requiere de una refrigeración entre 2 a 8 grados por hasta 3 meses, lo que facilita su distribución respecto de otras vacunas como la de Pfizer o Sinovac. Además, solo necesita de una dosis por persona de momento.
Sobre la protección que otorga la vacuna, el director (s) del ISP, Heriberto García, contó a T13 que "los datos que se tienen es que la vacuna dura alrededor de cinco meses... la inmunidad, pero obviamente podemos ver que, a medida que esto avance, quizás la duración sea mayor o que se requiera una dosis de refuerzo".
"Una vez que las vacunas ingresen al país pasan por un proceso de control de calidad y se liberan para ser usadas inmediatamente", aseguró.
Sobre la aprobación, García contó que se hicieron algunas observaciones y la población objetivo es de personas desde los 18 a los 60 años. "La razón de esto tiene que ver con que la mayoría de los estudios fueron en esa edad y no hay un detalle específico respecto a las edades mayores".
"Lo que se tiene en evidencia es un estudio clínico que se publicó hace poco, pero que fue hecho con datos hasta noviembre. Dado eso, los datos que se tienen efectivamente dicen que con el tiempo esta vacuna va perdiendo la respuesta inmune celular. No sabemos todavía hasta cuanto tiempo dura efectivamente, y por lo tanto podría ocurrir que los estudios posteriores de esta vacuna digan que se necesite una segunda dosis de refuerzo", aseveró.
De esta forma, la vacuna de Cansino se sumará la de Pfizer/BioNTech, Sinovac y AstraZeneca.
