El Segundo Juzgado de Letras del Trabajo de Santiago ordenó que se indemnice con más de $6 millones de pesos a un profesor, quien fue despedido de un colegio en Maipú, Región Metropolitana, luego que le "recalcaran fuertemente que se vistiera en una forma más masculina".
Según recogió el fallo, los hechos se remontan a octubre de 2019, cuando sostuvo una reunión con autoridades del establecimiento educacional, quienes le manifestaron que se vistiera de forma más masculina "pues su manera de vestir no era la adecuada y no se ajustaba al perfil del establecimiento, ya que no aceptaban que un profesor tuviera gestos gay u homosexual, y su vestimenta llamaba mucho la atención a los alumnos y que los podía mal influenciar".
De hecho, apuntó que el orientador del establecimiento recalcó que "no querían fletitos que mal influencien a los niños, si no finges al menos ser macho te vamos a despedir". El docente afectado, al consultar a qué se refería, recibió comentarios como "que sus gestos y formas de vestir se asemejaban o dejaban de manifiesto su orientación sexual y que el colegio no estaba en condiciones de tolerar eso".
Pese a que el profesor tenía una buena evaluación interna y poseía un buen desenvolvimiento con los estudiantes, apoderados y colegas, había irregularidades en el ámbito laboral en su contra. Por ejemplo, las licencias médicas se le descontaban directamente de su sueldo, las que eran contadas como día de ausencias, según acusó.
En esa línea, en una reunión con la jefa de UTP se le felicitó por su buena gestión, pero le dijo que "debía mejorar su aspecto y comportamiento, en el sentido que no se notara su homosexualidad" si quería recibir sus bonos y ser bien catalogado.
Por diciembre del 2019, los profesores de ese establecimiento se organizaron para conformar un sindicato de trabajadores. Sin embargo, desde el equipo directivo y la sostenedora del recinto hubo una negativa. Y por febrero del 2020 se le notificó de su no renovación de contrato.
El jefe de recursos humanos, según apuntó el fallo, manifestó que la no renovación de su contrato se daba por "su participación en la fundación del sindicato y el hecho de que fuera homosexual (que) no eran parte de los lineamientos del colegio ni querían tener problemas ya que les podría traer malos entendidos o mal influenciar con su conducta homosexual a los alumnos".
Inicia el proceso legal y dictaminan pago de millonaria indemnización
Tras el despido y el posterior inicio de un proceso judicial, el Segundo Juzgado de Letras del Trabajo de Santiago acogió la demanda del profesor, por vulneración de derechos fundamentales, y declaró discriminatorio su despido.
Por lo mismo, instruyeron el pago de una indemnización de $6.081.592, por parte de la Sociedad de Instrucción y Educación El Alba.
En el fallo se manifestó que "ha quedado demostrado que aquella decisión (de despido) fue motivada en su vestimenta y comportamiento y participación activa en la conformación de un centro de alumnos, conductas que escapan a la facultad de mando del empleador".