A pocos días de dejar su cargo, el ex fiscal Carlos Gajardo habló sobre su renuncia al Ministerio Público por estar en desacuerdo con la suspensión condicional del procedimiento para el senador UDI, Iván Moreira, por el caso Penta, señalando que "se está impidiendo que la justicia pueda hacer un reproche penal a estas conductas que a nosotros nos parecen extremadamente graves".
Gajardo explicó en una entrevista con La Prensa de Curicó que la decisión de dar un paso al costado tuvo que ver con la imposibilidad de "convencer que nuestras posturas son las correctas", puesto que las decisiones con las que no está de acuerdo fueron tomadas "por los responsables de las investigaciones", lo que le produjo "un divorcio importante con ellas".
Asimismo, acusó que quienes deben hacer cambios "son quizás los que podrían ser los más perjudicados. Es difícil que un legislador haga una ley que lo perjudique a él”.
A pesar de lo anterior, comentó que "por una parte (tengo) una sensación muy placentera por el trabajo efectuado, de mucha dignidad por lo que se ha hecho".
Respecto de su futuro, descartó volver al ministerio, porque cree que "hay etapas que se cumplen y que uno las quema. Me gusta mucho una frase que dice no vuelvas al lugar donde fuiste feliz y yo en la fiscalía fui muy feliz. Creo que es una etapa cerrada”.
"Siempre habrá nuevas personas que se destaquen en sus trabajos y van a seguir combatiendo la corrupción. Si bien en este momento nuestra partida puede ser dolorosa, en el futuro probablemente inspirará a otros colegas para que realicen una labor en este sentido", concluyó.