Un día después de asesinar a su pareja con la que había vivido cerca de tres años, Manuel Díaz escapó a Argentina permaneciendo 10 años prófugo de la justicia.
El hombre que la propinó 10 puñaladas a Cristopher Palominos se mantuvo itinerante en el país trasandino, viviendo en San Luis, Mendoza y Buenos Aires, para no ser detectado.
La denuncia emitida por su nueva pareja, quien se enteró por medio de internet de que su condición de fugitivo, alertó a la Policia de Investigaciones (PDI), quienes lograron dar con el paradero del sujeto.
Manuel Díaz fue detenido en la ciudad de San Juan, último lugar donde recidió, el día 17 de diciembre de 2017. Fue formalizado por el delito de parricidio, arriegando hasta un pena de 15 años.
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