Hasta la fiscalía de Licantén llegó Luis Vidal, para entregar un nuevo testimonio en el marco de la investigación por la desaparición de Emmelyn.
Vidal fue una de las últimas personas que estuvo con la menor de 11 años. Según los antecedentes de la causa, él y la menor habrían acompañaron a José Navarro a buscar un supuesto tesoro en el sector de Quelmén. Cuando Vidal ya había cavado un hoyo de cerca de un metro y medio de profundidad, el supuesto secuestrador le habría pegado con una pala en la cabeza y para luego escapar con la niña.
De acuerdo a un informe policial, Navarro -de 31 años y condenado por delitos sexuales- "no tiene patologías desde el aprendizaje, pero tiene patologías en el ámbito emocional, porque es narcisista".
"Él no se vincula emocionalmente con las demás personas, sino que las utiliza para sus necesidades, para que lo gratifiquen, adulen, por eso se muestra como una persona con capacidades superiores, con poderes místicos, como un brujo que tiene fuerzas sobre humanas", asegura el informe sobre el presunto captor de la niña, conocido ayer.
La búsqueda en el sexto día
En paralelo, siguen las labores de búsqueda en los bosques de Licantén. Seis grupos de búsqueda y 82 personas son parte del operativo que en su sexto día, sigue sin dar resultados.
"Trabajamos durante el día y la noche", afirmó el capitán Arnaldo Carrasco, jefe del comando operativo.
Como parte de las labores, se sumó un globo térmico, que sin luz detecta las ondas de calor, y un grupo de voluntarios que llegaron con drones.
"Estamos convencidos que los drones pueden ayudar a salvar vidas y a encontrar personas", afirmó Mauricio Tapia, encargado de los voluntarios.
