Este viernes, se dio a conocer que una mujer fue trasladada hasta un Cesfam de Pirque sin signos vitales tras someterse a un “tratamiento de desintoxicación” realizado por un 'terapeuta natural'.
La mujer se habría sometido al tratamiento en el “centro chamánico” Manto Wasi durante la tarde del jueves.
La mujer presentó problemas de salud y ahí fue cuando el “terapeuta” identificado como César “Rumi” Ahumada, la llevó al centro de salud, donde ingresó sin signos vitales.
Según información de Emol, la víctima era Antonella Canales Villablanca de 38 años, de nacionalidad chilena.
La ingeniera comercial trabajaba como coordinadora (s) de Canales de Atención en el Ministerio de Desarrollo Social.
En el “tratamiento de desintoxicación”, la víctima tuvo que ingerir tabaco líquido y posteriormente vomitarlo, lo que se conoce como “trabajo de purga”.
El sitio web de Manto Wasi explica que “el trabajo con plantas purgativas ayuda a la eliminación de toxinas, reordena la energía y favorece a la claridad del pensamiento, por lo que permite una mejor toma de decisiones y un fortalecimiento de la voluntad”.
Por otra parte, se investiga el consumo de ayahuasca por parte de la mujer y que además, padecía problemas cardiacos previos.
¿Quién es el "terapeuta natural" César "Rumi" Ahumada?
César “Rumi” Ahumada es el director del centro Manto Wasi, al que acudió la fallecida para recibir tratamiento. En el sitio web de ese centro fundado en 2006, Ahumada se define como "curandero vegetalista".
“Manto Wasi es un centro chamánico terapéutico con 18 años de experiencia en el uso ritual de la ayahuasca y otras plantas amazónicas, que en combinación con la psicoterapia se orienta a colaborar con el proceso de sanación de la persona, a fin de establecer mejoras en su calidad de vida y bienestar”, expone la descripción.
En 2009, el “terapeuta natural” enfrentó a la Justicia por el delito de tráfico de drogas debido a que la ayahuasca contiene DMT, un compuesto de efectos alucinógenos.
Tres años más tarde, en 2012, el Cuarto Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de Santiago decidió absolverlo, a él y a su pareja, del delito de tráfico de drogas, a pesar de que la Fiscalía pedía siete años de prisión para ambos.
