Durante este domingo, el director nacional de Greenpeace, Matías Asun, visitó Mesa Central para abordar el desastre ambiental en Quintero y Puchuncaví y las medidas que se deben tomar en la zona respecto a la contaminación.
Y es que durante la semana pasada, se dictó una alerta amarilla producto de la confirmación de los casos de intoxicación en la zona; causando la suspensión de clases y reactivando las alertas sobre el cordón industrial que funciona ahí.
Al respecto, Asun sostuvo que “en el corto plazo, deberían cerrarse las industrias que están contaminando. Hay que apagar estas industrias cuanto antes” y puntualiza que “no se acaba la luz si apagamos las termoeléctricas. Se deben tomar medidas drásticas”.
En ese sentido, añadió que “hay que retirar todo el material contaminado que hay en la región” y que actualmente “la realidad es que no hay estudios que permitan esclarecer cuáles son los impactos”.
Sobre lo mismo, indicó que “lo principal en esto son las personas y el derecho de vivir en un ambiente libre de contaminación” y que “hay que perderle el miedo a apagar la fundición en Ventanas”.
Por otro lado, comentó los dichos del ministro de Salud, Emilio Santelices, asegurando que “le baja el perfil a la situación. Siendo que hay 50 años de contaminación en la zona”.
Sobre las responsabilidades de la contaminación en la zona, aseguró que “ninguna de las empresas que está en la región está exenta de responsabilidades, pero la culpa también es de las municipalidades y el gobierno”.
“Muchas de estas empresas tampoco se han sometido a servicios ambientales actualizados. Evidentemente hay un problema de fiscalización”, agregó al mismo tiempo que señaló: “No puede ser que el gobierno no haga nada y que en los últimos 20 años tampoco haya hecho nada (…) se necesita una respuesta para que las empresas dejen de contaminar ahora”.
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