Este 1 de diciembre se conmemora el Día Mundial de la Lucha contra el Sida. Sin embargo, para el presidente de la Corporación Sida Chile, Dr. Carlos Beltrán, no hay mucho que celebrar.
"Es un hecho indesmentible que Chile ha ido aumentando progresivamente su tasa de transmisión de casos nuevos de VIH. En 7 años, el número de casos nuevos se ha duplicado", asegura Beltrán.
Desde el primer caso de contagio que se registró en 1984, Chile había controlado la expansión de la epidemia de VIH/Sida con un relativo éxito, sobre todo comparado con el resto de la región latinoamericana. Sin embargo, las últimas cifras dadas a conocer por el Ministerio de Salud y la Encuesta Nacional de Salud (ENS) prendieron las alarmas, al menos entre los especialistas de salud y las agrupaciones de la sociedad civil.
De hecho, Chile es el país latinoamericano que experimentó el mayor número de nuevos casos de VIH entre 2010 y 2016. Según cifras del Minsal, los casos se elevaron un 66% en este periodo y se espera que para fines de 2017 hayan 5.200 nuevos casos.
Para Beltrán, el número de contagios se explica por diversos factores. "Los últimos resultados de la ENS muestran que el uso de preservativo en la gente joven disminuyó prácticamente a la mitad en los últimos seis años. Solo el 15% de los jóvenes menores de 25 años se han hecho el test de VIH alguna vez".
Un panorama de nuevos contagios que -asegura- sí estaba en conocimiento por los especialistas, pero éstos no fueron oficializadas por el Minsal. "El año 2015, nosotros como corporación le presentamos al Minsal lo que estábamos observando y la respuesta fue que el Ministerio no veía un aumento en el número de casos. Por lo tanto, perdimos dos años en abordar un problema que ya en esa época era muy grave y que tiene que ver con el desplazamiento de la epidemia hacía las edades más jóvenes", comenta.
Efectivamente, la epidemia de VIH/Sida ha ido paulatinamente tomando fuerza entre los jóvenes chilenos. Por ejemplo, según la directira del Injuv en La Araucanía, Olivia Langer, 7 de cada 10 jóvenes con VIH en la región todavía están cursando enseñanza media.
Pero Edgaro Vera, jefe del Programa Nacional de Prevención y Control de VIH/Sida, ve la situación con un poco más de optimismo.
"La lucha contra el VIH ha tenido grandes logros con respecto a otras patologías durante los últimos diez años", asegura a T13.cl.
Sin embargo, Vera reconoce que existen algunos problemas pendientes que tienen que ver con "cómo implementamos una educación sexual y reproductiva en los establecimientos educacionales, cómo generamos que desde la niñez hasta la adolescencia, los jóvenes y adolescentes puedan conocer las medidas de prevención, sepan donde acceder a un preservativo".
Además de que los jóvenes sepan dónde acudir "en caso de que tengan una infección de transmisión sexual. En definitiva, para que las cifras que estamos viendo, cambien y tengamos una sociedad, y sobre todo una población joven, que viva sanamente su sexualidad".
Los factores que explican el alza
El doctor Beltrán asegura que hay tres factores que han posibilitado la fuerte alza de los nuevos casos de contagio. "En primer lugar, la ausencia de políticas públicas en VIH en los últimos 12 años. No hay ninguna política pública de VIH y no ha sido prioridad de ningún gobierno. En segundo lugar, hay una sociedad hipócrita que invisibiliza el problema, familias que no hablan con sus hijos, y no existe educación en salud sexual por considerarse temas tabú", sentencia.
Por último, el doctor agrega que ha habido un "cambio en el comportamiento sexual de la juventud que no ha sido abordado como un problema en términos de salud sexual. Aquí ha habido un cambio sustancial en el comportamiento sexual de los jóvenes. Ahí tienen una mezcla explosiva; ausencia de políticas públicas, un tema que no es abordado desde un punto de vista social y educacional, y un comportamiento sexual que cambió drásticamente sin que se hiciera nada en términos preventivos".
"Chile no tiene ningún número positivo que exhibir. El VIH en 7 años se va a prácticamente a duplicar. Las tasas de gonorrea están más que duplicadas, las sífilis aumentó dramáticamente, hay brotes de hepatitis de transmisión sexual", dijo Beltrán a T13.cl.
Los desafíos de un Chile sin control
En enero de 2017 se firmó el acuerdo 90–90–90 entre organizaciones de VIH de Naciones Unidas y algunos países de la región latinoamericana. En éste, se establecieron metas para el 2020 que incluyen un compromiso a aumentar al 90% la proporción de personas con VIH que conocen su diagnóstico, a incrementar al 90% aquellas bajo tratamiento antirretroviral, y a que el 90% bajo tratamiento tenga carga viral suprimida.
Pero "en vez de avanzar hacía las metas de la Organización Mundial de la Salud, Chile se va alejando progresivamente de esa meta", afirma Beltrán.
Para el especialista "aquí hay ejes que son fundamentales, como es la realización amplia y masiva del test de VIH que es la puerta de entrada para la prevención. No hay prevención si no hay realización del examen. Eso es clave. Además de la implementación de nuevas estrategias preventivas que incluyen el uso de medicamentos para la prevención del VIH para las personas que no viven con el virus".
"Esas son las cosas urgentes para implementar, pero para que tengan resultado al largo plazo se necesita comenzar ahora ya, con políticas claras, sinceras y honestas en educación en salud sexual, desde el ingreso al colegio en adelante", afirma Beltrán.
Sobre la oposición valórica que los proyectos sobre educación sexual que han existido en Chile, el doctor Vera -encargado del programa contra el VIH del Minsal- asegura que "independiente del proyecto educativo o la visión valórica que pueda tener un establecimiento educacional o los padres, este no es un tema de valores, sino que un tema de salud pública".
"Las acciones que tengamos o no tengamos con la población más joven y adolescente tienen implicancias directas en la posibilidad de adquirir un infección de transmisión sexual y dentro de ella, la más grave de todas que es el VIH", afirma Vera.
Además, Vera agregó que "frente a temas de salud pública uno tiene que tener una visión de Estado, donde se tienen que integrar distintos actores que son importantes y donde la forma de prevención son bien claras y establecidas".
"Yo creo que el desafío por parte del Ministerio de Salud es generar una política que sea dual; que por un lado fortalezcamos los cambios conductuales de las personas, pero también, frente a las personas que tengan un condón a la mano y sepan cómo utilizarlo e igualmente no lo utilicen, nosotros tengamos una forma de gestión de riesgo para disminuir la probabilidad de adquirir VIH u otras ETS", asegura la autoridad ministerial.
