La Corte de Apelaciones de Santiago fijó en cien millones de pesos la indemnización que el fisco debe pagar al cantautor Mauricio Redolés, por concepto de daño moral por las torturas de las que fue víctima en diciembre de 1973 en el inicio de la dictadura militar.
Redolés era estudiante universitario en diciembre de 1973, en Valparaíso, y fue detenido por funcionarios de la Armada, quienes lo sometieron a torturas en recintos y buques de la institución.
El tribunal de alzada aumentó el monto de la indemnización para el músico, quien estuvo detenido en la Academia de Guerra Naval, el buque Lebu, el Hospital Naval, isla Riesco, cuartel Silva Palma, la cárcel pública y el cuartel general de la Policía de Investigaciones, antes irse exiliado a Inglaterra, donde estuvo hasta 1985.
“En la citada sentencia de la Corte IDH, este tribunal internacional estableció la responsabilidad del Estado de Chile por el rechazo por parte de los tribunales de justicia nacionales, de acciones civiles intentadas por las víctimas de reparación de daños ocasionados por actos calificados como crímenes de lesa humanidad, con base en la aplicación de la figura de la prescripción, proceder que calificó como hecho ilícito y que fue reconocido como tal por el Estado en la citada instancia”, dice el fallo de la Corte de Apelaciones.
“Que, finalmente, este tribunal comparte los fundamentos invocados por el juez de primera instancia para determinar la procedencia del resarcimiento reclamado, estableciendo la existencia de padecimientos que deben ser indemnizados por constituir el daño moral que sustenta la demanda, sin perjuicio de considerar que resultan insuficientes, en concepto de esta corte, los montos fijados para resarcir al actor, en atención a la extensión de los males causados por las torturas sufridas, cuyos efectos físicos y psicológicos sigue padeciendo en la actualidad”, añade.