El Tercer Juzgado de Letras de Punta Arenas condenó al Estado a pagarle $250 millones a un joven que presentó una demanda tras perder una pierna mientras hacía el servicio militar en 2020, producto del disparo de uno de sus compañeros.
El incidente ocurrió el 4 de febrero de 2020, cuando Manasés Ezequiel Muñoz Astudillo, de entonces 19 años, era conscripto en Porvenir, específicamente en el Destacamento Motorizado Caupolicán. Mientras realizaba sus labores de guardia, uno de sus compañeros comenzó a jugar con su fusil, el que se disparó, impactando en la pierna de Manasés.
Según información de Las Últimas Noticias, el fallo detalla el momento del accidente, mencionando que el compañero "procede a manipular su armamento de cargo extrayendo los tres tiros de fogueo y colocando en forma manual un tiro de guerra en la recámara del fusil, y al momento de preparar se dispara dicha arma, impactando el tiro en el muslo derecho saliendo por la parte posterior de la pantorrilla de Muñoz Astudillo".
Juan Aedo, abogado de Muñoz, comentó al mismo medio que el fallo reconoce que ocurrió una negligencia, ya que “hay un protocolo del Ejército que dice que los soldados que tienen las Pautas de Observación de Conducta (POC) alteradas no podían estar de guardia. Sin embargo, el Ejército obvió todo eso".
"Este joven, el día que estuvo de guardia con Manasés, toma el fusil de guerra, porque no estamos hablando de una pistola, y se pone a jugar con él. Mientras jugaba con el fusil, percutó un disparo. Manasés estuvo a punto de morir. Si no fuera por la rápida acción de los enfermeros, que hicieron los torniquetes adecuados, Manases muere”, agregó.
Si bien en la demanda se solicitó un pago de $300.000.000 para el joven amputado y $150.000.000 para cada uno de los padres, el fallo del tribunal condenó a una indemnización de $250.000.000 a Manasés Muñoz y $25 millones a cada padre.
"Es un poco irrisorio, pero los responsables tuvieron días de arresto y anotaciones de demérito, no más" dijo Aedo a LUN, concluyendo “estamos tranquilos con el fallo, pero obviamente que nuestros clientes no se sienten cien por ciento satisfechos, especialmente los papás".
