Semanas clave se viven al interior de la Fiscalía Nacional en medio de la definición por quién será la nueva persona que lidere el organismo encargado de la persecución penal en Chile.

En este contexto, el proceso para designar a este nombre implica la participación de los tres poderes del Estado: el Judicial, el Ejecutivo y el Legislativo.

¿Cómo se realiza este proceso? En T13.cl te contamos.

17 postulantes y una quina

Al día de hoy, hay 17 candidatos para el cargo, entre los que destacan algunos rostros conocidos por haber ejercido previamente dentro del Ministerio Público, abogados externos y académicos.

Estos son: 

  • Emiliano Andrés Arias Madariaga
  • Eugenio Elías Campos Lucero
  • Esteban Celis Vílchez
  • Karinna Cecilia Fernández Neira
  • Marta Ximena Herrera Seguel
  • Erika Alejandra Maira Bravo
  • Nayalet Alejandra Mansilla Donoso
  • Juan Agustín Meléndez Duplaquet
  • José Andrés Morales Opazo
  • Patricia Alejandra Muñoz García
  • Carlos Alberto Palma Guerra
  • Iván Marcos Pavlov Peric
  • Ricardo Tomás Peña Fighetti
  • Rodrigo Hernán Ríos Álvarez
  • Nelly Dámaris Salvo Ilabel
  • Ángel Mauricio Valencia Vásquez
  • Cristian Vargas Méndez

Estos 17 candidatos podrán exponer ante el pleno de la Corte Suprema el próximo 7 de noviembre. Durante esa jornada cada uno de los aspirantes tendrá un plazo aproximado de 10 minutos para convencer a los integrantes del máximo tribunal sobre su idoneidad para el cargo.

Luego de las exposiciones, la Suprema deberá deliberar sobre los postulantes. Cada uno de los ministros contará con tres votos, y finalmente se seleccionarán a los cinco nombres más votados para conformar la quina.

La Moneda y el Congreso

Esta quina pasará a manos del Presidente Gabriel Boric, quien deberá seleccionar uno de estos nombres para que sea finalmente ratificado por el Congreso.

La persona elegida deberá ser respaldada por el Senado, donde debe contar con el voto favorable de dos tercios de sus miembros en ejercicio, en una sesión que debe ser convocada especialmente para dicha votación.

En caso que el Senado no apruebe la nominación, la Corte Suprema deberá completar nuevamente la quina proponiendo un nuevo nombre en sustitución del rechazado. En este sentido, el proceso se repetirá hasta que se apruebe un nombramiento por parte de la Cámara Alta.

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