Este jueves comenzó en Valparaíso la preparación de juicio oral en el caso de Rodrigo Avilés, estudiante que fue impactado por un chorro de un carro lanza aguas de Carabineros durante una manifestación ocurrida del 21 de mayo de 2015. El joven resultó con un TEC cerrado y un estado de salud crítico.
La investigación de la Fiscalía se formalizó contra un ex carabinero que manejaba el chorro al momento del ataque. Ahora el ex funcionario es acusado por el Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH) como autor de los delitos de homicidio frustrado con resultado de lesiones graves y solicita 15 años de cárcel.
El Ministerio Público, en tanto, lo acusa de lesiones graves, solicitando una pena de 540 días. La familia Avilés además acusa por el delito de violencia innecesaria, requiriendo una pena de 10 años.
Ahora se espera que los antecedentes sean remitidos al Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de Valparaíso, que deberá fijar fecha para la realización del juicio oral dentro de los próximos 60 días.
El imputado fue alejado de la institución uniformada tras el hecho y mantuvo durante la investigación su versión de que nunca vio a Rodrigo cuando operaba el carro lanza aguas.
El caso se considera simbólico en cuanto a los protocolos que usa Carabineros para mantener el orden durante manifestaciones sociales. Un año después de la agresión a Avilés —cuando un grupo de encapuchados quemó un edificio municipal con un trabajador adentro— la entonces Presidenta Michelle Bachelet reconoció que el caso pudo haber "inhibido" a algunos policías.
