"Yo no me acuerdo de donde no he estado, no me acuerdo de lo que no he hecho", aseguró el ex comandante en jefe del Ejército, Juan Emilio Cheyre, al referirse a las acusaciones que pesan sobre él por presuntas violaciones a los derechos humanos, cuando era teniente de la institución en La Serena.

En entrevista con el diario El Día, el mismo medio al que le entregó en octubre de 1973 el bando con las 15 ejecuciones de la Caravana de la Muerte en esa ciudad, Cheyre repasó sus acciones, reiterando su inocencia en los hechos que se le investigan, agregando enfático que "no he cometido ningún delito, ¡Jamás!".

En la publicación, el ex comandante en jefe indicó que "mi estada en La Serena cambió mi vida, porque el dolor que vi en el hecho que le relato, de ver a estas familias a horas de ser asesinados sus deudos se reunían con el comandante llorando y había algunas familias de conscriptos".

Además agregó que "no he estado vinculado con ninguno de los episodios que se mencionan. Me han investigado por 40 y tantos años y en profundidad, más de 25 años. Lo mismo que publican algunos periodistas hoy de mi participación en la Caravana (de la Muerte), donde no tuve ninguna participación, se decía cuando yo era comandante en jefe o antes. Esto lo conversé con todas las autoridades. Di cuenta de mis hechos. Me investigaron en ese tiempo y posteriormente. Nunca han encontrado nada y yo no encuentro nada en mi vida que me vincule a la violación de los derechos humanos. Si lo hubiera encontrado, no habría aceptado ningún cargo. Yo no he cometido ningún delito".

En tanto, al ser consultado sobre la acusación de Nicolás Barrantes, que asegura haber sido torturado por Cheyre en 1973, y por la cual fue interrogado en mayo de este año, indicó que "yo no descarto que lo hayan torturado, por qué lo voy a descartar y me duele mucho que haya sufrido en los 10 días de Ovalle, en los 40 días en la cárcel y estuvo solamente, según él una hora y media en el regimiento. Lo que yo descarto es que en esa hora y media estuviese ahí (...) Con todo el dolor que me puede producir el señor Barrantes y le reitero que es sincero, pero cómo puede ser que por una hora y media que está en el Regimiento, donde dice no haber vuelto nunca más, sin haberme conocido, me pueda hoy día estar diciendo que yo fui el que le causó los problemas y nada se diga de los días que estuvo en otra parte. Esto tiene un mismo modus operandi y una misma forma de actuar".

El general en retiro puntualizó que "lo único que espero es justicia en lo personal y que la verdad se imponga... Lo que espero es que esta tragedia termine y termine bien. Tengo un dolor muy grande, un dolor de no poder estar haciendo mis voluntariados y mis clases. Un dolor por mi familia. Yo me puedo acordar y puedo reconocer lo que hice y dónde estuve, pero no puedo reconocer o saber de películas que no he visto y esas películas no las he visto, yo no me acuerdo de donde no he estado, no me acuerdo de lo que no he hecho".

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