"No habrá piedad con los extremistas". Con esa frase, según consigna el libro del autor Mario Amorós "Después de la lluvia: Chile, la memoria herida", Augusto Pinochet Ugarte advirtió a sus opositores el 18 de septiembre, sólo una semana después del Golpe Militar que lo dejó en el poder en detrimento del Presidente Salvador Allende.
A partir de esa premisa es que planificó uno de los principales operativos militares de ese año que más tarde sería conocida como "La Caravana de la Muerte" con el general Sergio Arellano Stark a cargo.
La idea era que al comando del general de Ejército que falleció este miércoles, una comitiva recorriera el país de sur a norte ejecutando a decenas de prisioneros partidarios de Allende.
Según Amorós, Pinochet "otorgó a Arellano un poder absoluto al investirle con la condición de oficial delegado suyo".
De esta manera, la comitiva partió su recorrido el 30 de septiembre de 1973 a bordo de un helicóptero militar por ciudades ubicadas al sur de Santiago entre Rancagya y Puerto Montt. Luego, a partir del 16 de octubre, se realizó una gira hacia el norte de Santiago, entre Arica y La Serena.
La misión concluyó el 22 de octubre de ese año y finalmente se contabilizaron por lo menos 72 víctimas.
La muerte de Carlos Berger
Uno de los casos más conocidos es el de Carlos Berger, periodista y militante comunista que fue fusilado en Calama el 19 de octubre de 1973.
Su muerte es narrada por el libro "Morir es la Noticia". Ahí se cuentan los esfuerzos de su esposa abogada, Carmen Hertz por defenderlo ante el Consejo de Guerra y tras solicitar una conmutación de penas para su liberación.
Varios presos habían sido trasladados durante el día y en la noche Hertz recibió una llamada telefónica anónima en su casa: "Era para decirme que habían sacado de la cárcel a todos los presos políticos y que no se sabía adonde los habían llevado. Luego colgó", explica la viuda a la publicación. Al otro día recibió la noticia de que su esposo había sido fusilado.
Procesos cursados
Pese a que en 2001, Ricardo Rivadeneira, abogado de Pinochet señaló que este"nunca ordenó ninguna ejecución y, ni mucho menos, ningún secuestro", la investigación hizo que el juez español Baltasar Garzón determinara el arresto del general mientras estaba en Londres basándose en querellas presentadas en Chile e investigadas por el juez Juan Guzmán Tapia.
Finalmente, Pinochet fue liberado y murió sin condena en diciembre de 2006 luego de que se le sobreseyera temporalmente del caso por razones de salud algunos años antes.
Sin embargo, la justicia chilena ha impuesto castigos por los efectos de la Caravana de la Muerte.
En el caso puntual de Arellano Stark, se le condenó a seis años de prisión por su participación en los asesinatos, pero en diciembre de 2015 se le sobreseyó aludiendo demencia.
El general en retiro padecía de alzheimer. Finalmente, falleció a las 4:00 de este miércoles en su domicilio particular.