En una sesión extraordinaria del Concejo Municipal de la comuna de Independencia, se aprobó el jueves de forma unánime la ordenanza que restringe los horarios de funcionamiento de barberías y peluquerías en la comuna.

Esta medida se implementa como respuesta a recurrentes situaciones de desorden público en la comuna, vinculados al funcionamiento de este tipo de locales hasta altas horas de la madrugada, asociadas a reclamos por ruidos molestos y otras incivilidades.

“No es una acción en contra de las barberías y peluquerías de nuestra comuna, sino que todo lo contrario, buscamos favorecer el funcionamiento real de estos negocios, diferenciándolos de lugares que ocupan este rubro como fachada”, indicó la alcaldesa Carola Rivero Canales, en una medida anunciada durante sus primeros días de mandato.

El toque de queda comercial para barberías y peluquerías de Independencia permitirá a los establecimientos de este tipo funcionar en temporada de verano, de domingo a jueves entre 9 a 22 horas; viernes, sábados y vísperas de festivos entre 9 a 23 horas. En tanto, en temporada de invierno, su funcionamiento será de domingo a jueves desde las 9 a 21 horas, viernes, sábados y vísperas de festivos de 9 a 22 horas, detalló el sitio oficial de la Municipalidad.

Por su parte, este tipo de comercios sólo podrán emitir ruidos dentro del horario de funcionamiento, y en relación estricta a su giro comercial, no pudiendo desarrollar fiestas ni otro tipo de actividades.

Junto con el anuncio de esta medida, la Municipalidad dispondrá de operativos de inspección adicionales en la comuna, con fin de dar cumplimiento a la ordenanza y fiscalizar a infractores, los que arriesgan sanciones como multas que van desde las 2 a 5 UTM, hasta la clausura de locales que, de forma reiterativa, incumplan el toque de queda comercial.

Esta iniciativa forma parte de la agenda de seguridad de la alcaldesa Carola Rivero Canales, quien asumió sus funciones durante la primera semana de julio, en lugar del actual delegado presidencial, Gonzalo Durán

Esta ordenanza viene a complementar una serie de medidas implementadas durante la gestión de la alcaldesa Rivero, como son la instalación de tres monopostes de seguridad, —los primeros en la zona norte de la capital, consistentes en vigilancia con cámaras PTZ de alta resolución con movimiento 360°, botón de pánico— y el aumento de la flota vehicular de seguridad pública.

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