La tarde de este domingo, en medio de las protestas por la conmemoración de un año desde las manifestaciones del 18 de octubre de 2019, dos templos religiosos se incendiaron en Santiago.
En primera instancia fue la iglesia institucional de Carabineros, la Iglesia San Francisco de Borja y posteriormente, la Parroquia de la Asunción, la cual, producto del grave incendio, su cúpula cayó y se destruyó.
Ante la destrucción y los ataques a templos religiosos, el Arzobispo de Santiago, Celestino Aós, lamentó los hechos de violencia que afectaron no solo a las iglesias, sino que han ocurrido en distintas partes del país.
Aós recordó el estallido social de 2019, y señaló que esperaba que este año no ocurrieran situaciones de violencia, sin embargo, "las acciones violentistas y las imágenes vandálicas las padecemos de nuevo hoy".
"Sentimos la destrucción de nuestros templos y otros bienes públicos, pero sentimos sobretodo el dolor de tantas chilenas, de paz, generosidad (...)"Esas imágenes no solo impactan y duelen en Chile, sino también en otros países", indicó Aós.
Aós envió un mensaje de apoyo a los feligreses. "Estamos unidos a ustedes, no perdamos la fé, ni la esperanza, el amor es más fuerte", indicó.
"Basta de violencia, no justifiquemos lo injustificable, Dios no quiere la violencia (...) Los invito a la oración, a purificar nuestro corazón para que no se nos meta el deseo de revancha, ni el rencor, ni el odio, ni la violencia", decretó el arzobispo de Santiago.
