Este miércoles, el Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de Angol dictó la sentencia absolutoria en favor de nueve funcionarios del Ejército que habían sido acusados de tortura contra cinco civiles en octubre de 2020.
De acuerdo a la acusación, tres hombres y dos mujeres estaban en un mirador en Collipulli, Región de La Araucanía, cuando se habría acercado un vehículo militar del que bajaron uniformados con armamento en mano y que gritaron "a tierra".
En esa línea, las cinco personas afirmaron que fueron obligadas a ponerse boca abajo y con las manos en la nuca, para luego ser amarradas de manos por la espalda con esposas plásticas y ser trasladados a un predio forestal.
Ahí, según su versión, fueron obligados a arrodillarse mientras eran apuntados con cañones, al mismo tiempo que habrían sido mojados con gasolina.
De paso, aseguraron que los militares simularon un fusilamiento, cuando uno de ellos dio la orden de "pasar bala". Luego, habrían abandonado el lugar.
Sin embargo, tales afirmaciones no pudieron darse por acreditadas en el proceso judicial, por lo que el tribunal decidió absolver a los uniformados, quienes eran acusados como autores de los delitos de tortura, secuestro y apremios ilegítimos.
