Falabella informó el jueves sobre el robo a un camión que llevaba la nueva PlayStation 5 (PS5) para ser comercializada por la tienda de retail, un hecho delictual que retrasó la entrega del producto para los compradores que se suscribieron a la preventa, y que ahora podrán obtener su codiciada consola recién desde el próximo 15 de diciembre.

A sólo un día de este episodio, durante la presente jornada comenzó a circular en redes sociales una publicación ofreciendo, de manera ilegal, la tan esperada PS5.

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Sin embargo, al tratarse de un producto tecnológico que requiere conexión a internet, a la Policía “no le es tan difícil poder pesquisarlas”, según advierten desde la PDI. 

“El cuidado que tiene que tener la gente de comprar estas especies robadas, es que finalmente a la Policía no le es tan difícil poder pesquisarlas por dos razones. Primero porque vienen asociados a códigos de serie, es decir, un número de identificación de cada producto que vienen en las facturas que ingresan por Aduana”, explicó a T13.cl el subprefecto Óscar Bacovich, jefe de la Brigada Investigadora de Robos e Intervención Criminal (Biro Incri) de la PDI.

“Sumado a eso la conexión a internet que nos va a permitir, a través de una dirección IP, localizar el lugar de conexión de esa consola y la Policía va a llegar a ese domicilio, con una orden judicial o una orden del Ministerio Público, con la finalidad de poder incautar esa especie y además de eso detener a la persona que es poseedor de la especie”, detalló.

Acerca de los riesgos que corre la persona que se exponga a comprar una de estas consolas, el subprefecto señaló que “esa persona va a ser detenida y puesta a disposición de los tribunales a través del Ministerio Público por el delito de receptación, entendiendo que el delito de receptación es aquel que se hace partícipe del delito por medio de la compra de un bien robado”.

“Lo importante es educar a la ciudadanía, en términos de no comprar especies robadas en los mercados informales, que no esté acreditado con una factura o una boleta, porque finalmente lo que va a pasar es que, primero, va a perder el dinero que invirtió en la compra de ese producto y segundo, que va a arriesgar una pena y ser detenido por la Policía de Investigaciones o Carabineros por el delito de receptación”, concluyó el subprefecto.

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